Dos personas saliendo ayer a primera hora de la sede central de Grupo Playa Sol. | Marco Torres

La nueva administración judicial de Grupo Playa Sol emplazó ayer a los proveedores a la próxima semana para cobrar lo que se les adeuda desde agosto del pasado año, según indicaron algunos empresarios que trabajan con la empresa hotelera.

De esta manera, y a pesar de que la pasada semana, el administrador judicial, Javier Perelló, anunció en una reunión que ayer se saldarían las deudas, o parte de ellas, con los proveedores, la promesa no se hizo efectiva. Con esta premisa, algunos proveedores han decidido no garantizar más productos a los establecimientos hoteleros hasta que no se garantice algún aval monetario, según fuentes consultadas. Otros, en cambio, optan por seguir trabajando con Grupo Playa Sol hasta la semana que viene, a la espera de nuevas noticias. «La empresa sigue a la espera de obtener ayuda económica del banco, pero éste no puede desbloquear aún la situación», explicaba uno de los proveedores a este periódico.

Algunos de los suministradores indicaron que ya no existen demasiadas reservas en los establecimientos abiertos y dudan que puedan aguantar hasta la próxima semana con las provisiones existentes. Las fuentes consultadas estiman que puede haber más de una veintena de empresas pendientes del cobro por parte de Grupo Playa Sol.

De hecho, y ante la situación con la que se enfrentan, Grupo Playa Sol ha contactado con nuevos suministradores de la Isla garantizándoles el pago de los pedidos en 30 días, según indicaron algunos empresarios. «Nos garantizan que el cobro será entre los 30 y los 90 días, pero creo que será más a los 90, como el resto de empresarios del sector», recalcó otro abastecedor.

En el caso de los trabajadores, la situación permanece igual. Sin percibir la nómina de mayo. «Estamos un poco desanimados porque parece que nos están engañando para que no demos guerra», indicó una trabajadora de la empresa. Según apuntó, se están modificando los contratos de cuatro horas a ocho, «pero no hemos firmado nada y aquí nadie dice nada», recalcó.

Desde los sindicatos indicaron que lo normal en la empresa «era cobrar hacía el día 15 o 20, así que esperaremos un poco para ver si consiguen la liquidez necesaria». La nueva dirección de la empresa, por su parte, se mantiene hasta el momento sin hacer declaraciones.

Está «sereno» pero «fastidiado» de salud

El abogado de Fernando Ferré, Gabriel Garcías, indicó ayer a este periódico que durante la visita que le hizo a su cliente en la cárcel lo encontró «sereno, pero fastidiado de la salud», apuntó. En cuanto al inicio de los trámites por parte del juzgado, Garcías indicó que se debe estudiar si las propiedades pueden cubrir los 80 millones de euros. «Hay muchas que tienen hipotecas y no sé lo que hay, creo que sí se puede llegar, pero habrá que estudiarlo», indicó el abogado de la defensa.