La ocupación hotelera durante el mes de mayo aumentó un 5,5 por ciento en comparación con el mismo periodo del año, llegando a una media del 48,3 por ciento de plazas ocupadas frente al 45,8 por ciento que se registró en 2009, según los datos facilitados por la Federación Hotelera de Eivissa y Formentera.

Por islas, los establecimientos hoteleros de Eivissa lograron una ocupación del 49 por ciento, lo que supone un incremento del 5,4 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior. Formentera, por su parte, experimentó un incremento del 6 por ciento respecto al pasado año, a pesar de obtener una media de ocupación del 39,8 por ciento, según los datos de la Federación.

Por municipios hay que resaltar que la zona norte de Eivissa fue la única que experimentó valores negativos, con un descenso del 6,5 por ciento en comparación con el pasado año, logrando una ocupación del 49 por ciento. La zona denominada Vila, que incluye Talamanca, ses Figueretes, es Viver y toda la zona de Platja d'en Bossa, fue la que registró el incremento más fuerte con un 15,4 por ciento con una ocupación media del 55,29 por ciento, la cifra más alta de toda las Pitiüses.

El municipio de Santa Eulària, por su parte, constató un incremento del 6,4 por ciento en el número de plazas ocupadas con una media del 51,4 pro ciento. Sant Antoni y la bahía de Cala de Bou aumentó la ocupación en un 3,1 por ciento en comparación con el quinto mes del pasado año, mientras que la zona de calas de Sant Josep aumentó en un 1,7 por ciento, llegando a una ocupación media del 34,7 por ciento, según los datos facilitados por la Federación Hotelera.

La segunda quincena del quinto mes del año registró una ocupación media del 56,3 por ciento frente al 53,4 por ciento del pasado año, lo que supone aumentar las cifras en un 5,3 por ciento. En este periodo, Eivissa contó con un 54 por ciento de ocupación media, mientras que Formentera registró un 47,6 por ciento.

«Si todo va bien, habrá un incremento del 5%»

El presidente de la Federación Hotelera, Juanjo Riera, señaló ayer que si la temporada evoluciona de la misma forma que el mes de mayo, se podrá registrar al final del verano un incremento de entre un 4 y un 5 por ciento. Aún así, auguró que la temporada «será corta» ya que según indicó «en lugar de desestacionalizar se está estacionalizando más» e hizo referencia a que a lo largo del pasado año fueron muchos los establecimientos que cerraron sus puertas durante el mes de octubre. Riera confió en que durante el mes de julio la ocupación media se incremente hasta en un cuatro por ciento.