El actor da un apasionado beso en el cuello a su novia, María del Àlamo. | M.A.

Hace tres años que se conocieron y fue precisamente en verano, en una de las playas de Eivissa. Desde entonces, su complicidad, amor y pasión han ido creciendo, igual que su inclinación por pasar siempre que pueden algunos días de vacaciones en el lugar que vio nacer su amor. En esta ocasión, la guapa pareja ha podido disfrutar en las cristalinas aguas de Formentera, donde aprovecharon para mostrarse naturales, muy cómplices en sus gestos de cariño, relajados y muy divertidos, pues compartieron juegos e, incluso, Dourdan se atrevió con saltos un tanto complicados para lanzarse al mar. Tuvieron también tiempo de bailar en la lancha donde compartieron risas con varias de sus amistades.

Además de vivir días de relajo en las Pitiüses, el atractivo actor de CSI, del que hay que destacar su pérdida de peso respecto al verano pasado, aprovecha para trabajar. Una de sus últimas labores profesionales en territorio pitiuso fue presentar la gala de inauguración del festival de cine de la isla, donde señaló que le encanta Eivissa y, por ende, España. Por ello, no descarta fijar uno de sus lugares de residencia en el país del que conoce muchos más aspectos y lugares gracias a su novia María, quien además le enseña, poquito a poco, español. Gary y María son dos de los rostros y parejas más consolidadas del panorama social ibicenco desde que iniciaran su relación sentimental hace ya tres años.