El barco, aproximándose al puerto de la Savina. | Guillermo Romaní

La naviera Baleària presentó ayer de forma oficial el 'Passiò per Formentera', la embarcación que debe revolucionar las conexiones marítimas de la Pitiusa Menor con Dènia, Mallorca y Eivissa. Porque esta embarcación, que ha costado 42 millones, tiene 100 metros de eslora, capacidad para 800 pasajeros y 300 metros de carga lineal, lo que representa un centenar de vehículos, se desplaza a 22 nudos.
El buque ha sido diseñado para operar en el limitado puerto de la Savina y optimizar el consumo. En el nuevo buque, que unirá la isla con Dènia cinco días a la semana, y con Palma dos días a la semana, destaca el acceso, ya que no precisa de pendientes o desniveles.
Baleària ha invertido unos 100.000 euros en adecuar la plataforma de recepción de la Savina y, para el pasaje, se cuenta con una rampa mecánica que desde el nivel de muelle lleva a los usuarios hasta la planta de acomodación.
Ahí, los asientos no son asientos, son unas butacas grandes, ergonómicas y reclinables. El interior del buque es amplio, luminosos, existen numerosos espacios abiertos y paramentos acristalados, así como bares y cafeterías.
Sorprende como detalle positivo que la decoración exterior hace clara referencias al mundo hippy, con un inmenso dibujo de flores, arco iris, y la leyenda 'peace & love', y en el interior de los salones hay imágenes de portadas de discos, como un fragmento de una de Bob Marley y, sobre todo la portada completa del 'Blonde and blonde' de Bob Dylan.
El 'Passió per Formentera' tiene voluntad de permanencia en la isla pero los responsables de la naviera condicionaron sus presencia a la 'voluntad política' ya que con sus dimensiones y capacidades es una embarcación que no puede hacer la línea entre Formentera y Dènia sólo dos días a la semana con poca ocupación.