El Ayuntamiento de Eivissa informó ayer que la Policia Local ha reforzado la vigilancia en el barrio de ses Figueretes tras las reiteradas quejas de los vecinos por el aumento de la prostitución callejera y la «mala imagen» que supone para el barrio.

La principal novedad radica en que a los policías uniformados se suman agentes de paisano, tal y como habían reclamado los vecinos, que criticaron que el trabajo policial uniformado es poco efectivo porque provoca que las prostitutas se escondan cuando advierten su presencia.

La alcaldesa Lurdes Costa reconoció ayer que la prostitución «es una problemática específica» de ses Figueretes. Lo hizo durante la presentación de la bandera Ecoplatja que distingue a la bahía de Talamanca por su calidad medioambiental y los servicios que ofrece. Una presentación en la que Costa abordó otros temas de actualidad como el próximo dictamen de la Unesco sobre la posible inclusión en la lista de patrimonio en peligro de los bienes declarados, o el nuevo aparcamiento regulado en ses Figueretes (ver despieces).

La alcaldesa recordó que el aumento de la vigilancia en ses Figueretes se acordó en la Junta de Seguridad celebrada la semana pasada. Este refuerzo policial supondrá un segundo policía para el barrio que trabajará por las tardes y que se sumará a las patrullas conjuntas de la Policía Nacional y de la Policía Local, que desde el pasado 1 de julio vigilan el barrio. Asimismo, el Consistorio prevé instalar cámaras de vigilancia en las zonas de ses Figueretes donde se ha detectado una mayor problemática, un sistema similar al que funciona en la Marina.

Las denuncias

En un comunicado, el Consistorio informó que, desde el pasado 1 de junio, se han interpuesto 32 denuncias con multas de 300 euros cada una, sanciones reguladas por la Ordenanza Cívica municipal, aprobada el pasado verano, que prohibe ofrecer o solicitar servicios sexuales en la vía pública. Por ello, indicó que, si bien «entiende perfectamente las reclamaciones de los vecinos del barrios» destacó que «los vecinos deben entender que la ley no persigue esta actividad penalmente ni se puede evitar la libre circulación de personas en la vía pública».

Por último, la alcaldesa recordó que los Servicios Sociales están trabajando con el colectivo de prostitutas para prestarles asistencia debido a que, en la mayoría de los casos, son mujeres en una precaria situación personal y social.

Lurdes Costa: «A algunas personas les agradaría que el patrimonio esté en peligro»

Costa habló del Comité de Patrimonio Mundial que decidirá si la declaración de Patrimonio de la Humanidad se incluye en la lista de patrimonio en peligro por las obras del puerto. La alcaldesa indicó que el informe de los inspectores de la Unesco «en ningún momento dice que el patrimonio está en peligro, que es lo que le agradaría a algunas de las personas que forman parte de las asociaciones que hicieron las denuncias», indicó sobre el GEN y el IEE. «En mi opinión están haciendo mal a Eivissa como destino turístico y como lugar reconocido por la Unesco», concluyó.