La campaña insular contra los taxis pirata se retrasa y reduce a causa de la crisis

Según el conseller de Mobilitat, Albert Prats, la crisis y la falta de personal en el Consell ha obligado a retrasar la contratación de inspectores y también a reducirla. «Es verdad que hay complicaciones en el presupuesto y que hemos tenido restricciones para contratar personal con motivo de la crisis. Aún así, hacemos una excepción en este caso porque queremos darle la importancia que le hemos dado toda la legislatura», indicó Prats, que explicó que este verano operarán dos parejas de inspectores que se repartirán por la noche y por el día, a diferencia del año pasado, cuando seis personas hicieron esta labor. En este sentido, indicó que «estos días se están cerrando las contrataciones».

Temporada en marcha

Sin embargo, la temporada 'pirata' ya ha comenzado para los conductores particulares que operan sin licencia y, lo que es peor, taxistas de la isla aseguran que ya se han producido enfrentamientos que, por el momento, se han quedado en discusiones.

Para el presidente de la Asociación de Taxistas Autónomos de Vila, Vicente Prats, el «compromiso» que adquirió la máxima institución de luchar contra este problema histórico y que se materializó con campañas los últimos dos veranos se ha convertido en «papel mojado». «Estamos a principio de julio y aquí no hay nadie trabajando», se quejó el presidente de la asociación mayoritaria de la isla. «No hay folletos informativos, ni inspectores, ni control de ningún tipo. Y este año es más cansino porque hay taxis para dar y regalar, no entramos en las paradas», agregó sobre las licencias estacionales que otorgó la máxima institución para aumentar la oferta del servicio y que esta temporada suman casi un centenar.

En el mismo sentido se expresó el representante de Transporte Terrestre de la Cambra de Comerç, José Serafín. «Los 'piratas' siguen campando a sus anchas y este año no hay inspecciones», destacó, e indicó que el Consell no les ha dicho «nada» sobre el retraso de la campaña. «Hay que empezar en junio, no sirve de nada hacerla en julio y agosto cuando el transporte ilegal está instalado y opera de forma descarada», destacó. En este sentido, Serafín puso como ejemplo una situación vivida hace quince días por taxistas de Sant Antoni: «Decidieron abandonar una de las discotecas y dejársela a los piratas, porque operan con tanto descaro que deciden irse para no cometer ninguna locura».

Por último, el conseller Albert Prats recordó que la lucha contra el transporte ilegal «es competencia y responsabilidad de todas las instituciones» y que sólo el Consell «hace una contratación extraordinaria» para poner inspectores.