Una imagen promocional de Jose Manuel Casañ, lider de Seguridad Social.

Jose Manuel Casañ, vocalista desde la formación inicial de Seguridad Social en 1982, prepara un trabajo «maduro y profundo» para el año que viene, de entre más de 30 canciones propias. De momento, mañana en Sant Antoni el público ibicenco acudirá a un concierto en el que la banda tocará los temas de siempre, los de su último trabajo, Clásicos del futuro, y en el que promete qué habrá lugar «para las sorpresas».

-No es la primera vez que os encontráis con el público ibicenco. ¿Qué van a poder ver durante el concierto?
-Vinimos hace dos o tres años. Seguro que hay que gente que no nos ha visto nunca y claro, tocaremos temas de toda nuestra carrera, pero también una selección de temas del disco de hace dos años, Clásicos del futuro; y también habrá alguna sorpresita. Tenemos un repertorio enorme y; depende de cómo esté el público y del feeling que hay, doy un tema u otro. Siempre es bonito tener un espacio para la improvisación, no sólo a nivel de qué vamos a hacer sino, en medio del concierto, buscar que haya una interacción con el público. Siempre ha sido mi objetivo romper la barrera entre el público y el artista.

-Es decir, que les haces cantar.
-Cantar, bailar y elegir canciones también. ¿Qué queréis escuchar ahora? ¿Esta o la otra? Eso es hacerles partícipes. Interacción en el sentido de que puedan elegir qué escuchar y que sean parte de la selección del repertorio.

-En el nuevo disco 'Clásicos del futuro', hay versione, desde Chavela Vargas a The Clash. ¿Cómo se consigue hacer propios temas de artistas tan dispares?
-Siendo un poco iconoclasta y rompiendo clichés. No conformándonos con lo que hay y, sobre todo, a la hora de enfrentarte a una versión, darle mil vueltas y hacerla completamente distinta a la original. La historia es ser un sinvergüenza en el sentido más absoluto de la palabra y, sobre todo, tener lo oídos muy abiertos. Soy fan de las canciones más que de los grupos. Hay grupos infumables con canciones extraordinarias y seguiré siendo fan de esa canción.

-Una de las canciones más populares de vuestro repertorio ha sido 'Chiquilla'. Supongo que os la piden en vuestros directos. ¿Se ha llegado a cansar de interpretarla?
-No, que va. Al contrario. Además, con ella se vive uno de los momentos más álgidos del concierto, donde verdaderamente se funde el público con el artista. Estoy encantadísimo. Estoy super agradecido a Chiquilla. Cuando llegó, nosotros éramos un grupo prometedor y estábamos intentando llegar a primera división. Llegó Chiquilla y entramos directamente en Champions y la ganamos. Es muy agradecida. Es curioso porque es una canción que hice en 15 minutos. Nunca he hecho un tema en tampoco tiempo. Hay temas, como El viajero, que estuve ocho años haciéndola. No todos los días ocho horas, ya que la guardas en el cajón y demás. En un concierto, cuando llega Chiquillla, sé que va a ser apoteósico.

-Entonces, ¿la tocareis aquí?
-Seguro que sí. Pero lejos de ser previsible, tocaremos temas que todo el mundo conoce pero también habrá lugar para las sorpresas y también para hacer lo que nos apetezca en el escenario.

-¿Cómo hacéis para conectar con un público tan diverso?
-Hemos luchado por esa diversidad. Para conectar con el público más joven es con el mensaje que estas dando. Por ejemplo, a mi me gusta mucho Herman Hess, aunque el lenguaje pueda parecer anticuado el mensaje es muy joven y por tanto, muy actual. Es un espíritu inquieto que conecta con los jóvenes que aún no están adocenados.

-¿Os está afectando mucho la crisis a la hora de la contratación para las actuaciones?
-Sin duda. Somos privilegiados porque este año haremos treinta y muchas actuaciones, aunque hace cuatro años hacíamos el doble. Estamos en un impás, en un momento de cambio, pero yo soy muy positivo. Los cambios te van a hacer pensar más. Las crisis son buenas para no dormirte, para desarrollarte. Aunque estamos viviendo uno de los peores momentos de la industria discográfica, pero llegaremos a un punto de no incertidumbre.