El Govern balear rebajará la puntuación mínima para obtener el certificado oficial de catalán de 72 puntos a 50 (sobre 100). Esta medida se implantará a partir del próximo mes de junio, de acuerdo con el nuevo decreto que establece las equivalencias en el marco europeo común de referencia para la evaluación de las lenguas.
Antes de que entre en vigor la nueva normativa, debido a la gran demanda existente, este departamento ha convocado de forma extraordinaria, en febrero de 2011, una última prueba de niveles B y C.
El conseller de Educació, Bartomeu Llinàs, explicó que con esta nueva normativa se rompe la «barrera psicológica» que tenían muchos ciudadanos por la necesidad de tener que aprobar el examen con una puntuación de 7,2, en vez de con un 5.
En esta línea, Llinàs consideró necesaria la elaboración del nuevo decreto de acuerdo con un criterio de racionalidad en cuanto a la puntuación, de acercamiento a las personas que demandan estos certificados y de modernización en referencia a la normativa europea.
Junto al cambio en la puntuación mínima para obtener la acreditación, según explicó la directora general de Política Lingüística, Margalida Buades, la principal novedad es que se pasa de cuatro niveles -hasta ahora A, B, C y D- a cinco, equivalentes al marco europeo común de referencia, esto es, A2, B1, B2, C1 y C2. Asimismo, este departamento expedirá el nivel E que certifica conocimientos específicos de lenguaje administrativo.
Más concretamente, Buades ha aclarado que no habrá nivel A1 puesto que son conocimientos básicos que no es necesario evaluar y, por tanto, se empezará con el A2, nivel básico y que equivaldría al actual A, que acredita un dominio del catalán que permite una comunicación suficiente para situaciones habituales.
La nueva normativa establece, además, un nivel B1, que no tiene ninguna equivalencia reconocida, que certifica un conocimiento de la lengua para hacer frente a situaciones relativas al trabajo, el colegio, la familia o el ocio; el B2, que equivale al anterior B, y que es un nivel avanzado; el C1, igual al antiguo C, y que supone un dominio funcional efectivo del catalán; y el C2, que equivale al nivel D, y acredita un dominio completo de la lengua. Sin embargo, para presentarse a las pruebas de este último nivel habrá que estar en posesión del C1.

Nuevo apartado de expresión escrita en el examen
El decreto plantea un cambio en el formato del examen, que contará con cinco áreas de evaluación, es decir, comprensión oral y escrita, expresión oral y escrita y una parte de dominio propio del sistema lingüístico. Así pues, como novedad, hay un nuevo apartado de expresión escrita. También habrá un cambio en el método de evaluación, ya que la hasta ahora comisión consultiva pasará a ser un tribunal permanente, que estará compuesto por técnicos de las diferentes instituciones de Mallorca, Menorca, Eivissa y Formentera que se encargan de la difusión, enseñanza o investigación de la lengua catalana.