El presidente del Govern balear, Francesc Antich, el conseller balear d'Habitatge i Obres Públiques, Jaume Carbonero, y la alcaldesa de Vila, Lurdes Costa, entregaron ayer las llaves de la primera promoción de viviendas de protección oficial (VPO) del municipio ubicada en Platja d'en Bossa.

El edificio, construido por Ferrovial con un coste de 2,6 millones de euros, está formado por 38 viviendas de uno, dos o tres habitaciones y con aparcamiento subterráneo. Además, también existe un local comunitario destinado a lavandería que está equipada con tres lavadoras y tres secadoras así como un espacio para guardar bicicletas.

«Hoy empieza una historia particular para cada uno de vosotros. Unos podréis de dejar de vivir con los padres y otros podréis empezar a convivir con vuestra pareja», señaló la alcaldesa de Vila, que resaltó que una de las prioridades del Consistorio es «atender las necesidades de los ciudadanos».

El presidente del Govern balear, por su parte, señaló que Balears ha sido la comunidad donde se hacían más viviendas, «pero viviendas muy caras y no destinadas a gente con dificultades». «Había poca preocupación por parte de las instituciones y desde el primer momento nosotros quisimos cambiar esto», apostilló Antich. Así, según las palabras del mismo presidente autonómico, hasta el momento ya se han construido en Balears 4.600 viviendas de protección oficial. «Son muchas si lo comparamos con las que se construyeron en la legislatura anterior, 179 VPO. Antes no había ni política de vivienda, ni suelo», apuntó. En esta línea, Antich resaltó que la prioridad de su gobierno es que la personas «que tienen dificultades tengan el apoyo de las instituciones».

Vila, por su parte, recordó que actualmente se están llevando a cabo otras dos promociones de VPO en Can Cantó, con 30 y 18 viviendas, respectivamente. Además, está pendiente el inicio de una cuarta promoción ubicada en el Paseo Marítimo.