Miquel Jerez y Carmen Domínguez llegaron juntos al hotel donde tuvo lugar el encuentro. | Marco Torres

La presidenta de la junta local del PP de Vila, Carmen Domínguez, renunció ayer a ser la candidata a la alcaldía del Ayuntamiento de Eivissa. Lo hizo durante una reunión extraordinaria de la junta destinada a tratar dos cuestiones en su orden del día: dar cuenta a los afiliados de que el comité electoral había designado por unanimidad a Domínguez para que sea la candidata e, inmediatamente, trasladar su renuncia a la candidatura.

Al finalizar el encuentro, Domínguez explicó que decidió abstenerse «porque una parte de la junta no está de acuerdo» con que sea la cabeza de lista a Vila. «A mi me da igual que sean uno, sean diez o sean quince, porque mi caso es especial. Soy la presidenta, tengo una responsabilidad y además me aplico a mí misma unas medidas muy estrictas, que son, que si la junta por unanimidad no deseaba que yo fuese la candidata, yo inmediatamente iba a renunciar a ello», explicó, y destacó que el «comité electoral, tomó una determinación que no le sirve». «Ahora seguirá trabajando y buscando otro candidato con un poco más de prisa porque el tiempo se le echa encima», agregó la presidenta de la junta, aunque indicó que «ignora» las nuevas opciones que valora el comité.

Domínguez negó que su candidatura hubiera provocado una crisis dentro de la junta e insistió en que desconoce (salvo por la prensa) que un sector haya recogido firmas para conocer el proceso de elección ante la sospecha de que el comité la había elegido candidata. Una designación que, cabe destacar, el comité electoral adoptó a finales de agosto y que no fue comunicada hasta ayer a los afiliados de forma oficial. «No hablo de crisis, cuando hay elecciones, cuando es tiempo de elegir candidatos, es cuando surge esto, la democracia de elegir en un partido», destacó Domínguez, e indicó que «tenía muy claro que había gente en la junta que hubiera preferido otra opción» y que para ello no era necesaria una recogida de firmas.

Reticencia

Por su parte, el presidente insular del PP, Miquel Jerez, alabó el decisión de la presidenta de la junta y reconoció que había «una cierta reticencia a que fuera la persona elegida por el partido para encabezar el proyecto». «Personalmente creo que este gesto la honra y la dignifica muchísimo más como presidenta de la junta, y es precisamente lo que se ha visualizado. La intención del consenso, la solidez y, en definitiva, que Vila tenga un objetivo común de forma unánime que no es sólo ganar las elecciones, sino encontrar, de forma definitiva, el candidato de todos», destacó.

En este sentido, la presidenta de la junta explicó que «si esta designación hubiese caído sobre cualquier otro miembro, quizás se hubiese valorado que hubiera una mayoría» o incluso mantener la decisión del comité electoral que «es un órgano soberano». «Pero mi obligación como presidenta es mantener la junta unida, trabajando todos con todos, todos en un bloque, porque el objetivo, no lo olvidéis nunca, es ganar las elecciones a la alcaldía de Vila», destacó, y recordó que el PP lleva doce años en la oposición de Vila. «Nos toca ya ganar y en eso vamos a poner nuestro empeño y nuestra fuerza», remarcó.

Una reunión muy concurrida y llena de nombres propios

La junta extraordinaria se celebró ayer por la tarde en el hotel Royal Plaza con la asistencia de numerosos afiliados. Entre ellos se contaban Pere Palau, presidente del comité electoral de Vila; Miquel Jerez, presidente insular del PP, y Vicent Serra, conseller y aspirante a encabezar la lista al Consell d'Eivissa. También asistieron todos los concejales del PP en el Ayuntamiento de Eivissa y Virtudes Marí, portavoz del grupo municipal. El encuentro se extendió durante dos horas, algo poco común en las juntas extraordinarias. Sin embargo, algunos asistentes coincidieron en remarcar que muchos quisieron intervenir en la reunión, organizada de forma específica para tratar las cuestiones que atañen a la candidatura de Vila.