Las colas de los pasajeros en las ventanillas de las compañías aéreas, ayer, en la terminal ibicenca. | Marco Torres

Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) prevé que la normalidad vuelva hoy al aeropuerto de Eivissa, después de la reincorporación de los controladores aéreos a sus puestos de trabajo. Una consecuencia inmediata del Estado de Alarma decretado por el Gobierno que establece podrán incurrir en un delito de Desobediencia tipificado en el Código Penal Militar si se niegan a regresar.

El portavoz del sindicato de controladores USCA en Balears, Javier Zanón, aseguró que los tres controladores que tenían servicio ayer en el turno de tarde en la torre ibicenca se reincorporaron y, según confirmó AENA, lo hicieron bajo supervisión militar, a cargo de oficiales del Ejército del Aire desplazados al aeródromo ibicenco, y destinados también para preservar los vuelos de emergencias al igual que en el resto de los aeropuertos del archipiélago.

Sin embargo, esta reincorporación no impidió que ayer se cancelaran casi la totalidad de los vuelos programados, que sumaron un total de 49 (25 llegadas y 24 salidas). Al cierre de esta edición sólo había podido despegar un vuelo de Air Berlin con destino Palma a las 19,00 horas, poco después de que pasadas las 15.30 horas se reabriera todo el espacio aéreo español.

Los pasajeros afectados durante la jornada de ayer pudieron alcanzar las 5.300 personas, según la previsión de AENA del tránsito en el aeropuerto ibicenco antes de que se iniciara la huelga el pasado viernes. Sin embargo, el ente público alertó de que esta cifra podría haber cambiado, debido a que muchas cancelaciones del viernes se trasladaron a la jornada del sábado. En este sentido, cabe recordar que el viernes se cancelaron en Eivissa 25 vuelos que afectaron a 2.200 pasajeros. Asimismo, la estimación para hoy es que operen 58 vuelos y supongan un movimiento de 5.986 viajeros.

Las cancelaciones de ayer se debieron a que, a pesar de la previsión de reapertura del espacio aéreo, las compañías decidieron no operar hasta hoy. Según fuentes de AENA, las empresas aéreas han confirmado que reanudarán su actividad, a pesar de que no se descartan retrasos o algunas cancelaciones. Asimismo, desde el ente público informaron que, en principio, no se sumarán vuelos a los ya programados a fin de reubicar a más pasajeros que se hayan visto afectados.

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Por otra parte, cabe destacar que el Servei de Emergèncias 112 instaló una carpa en el aeródromo ibicenco. En este sentido, la directora insular, Sofía Hernanz, destacó que la jornada transcurrió con tranquilidad, aunque declinó dar detalles sobre un posible aumento de la seguridad, porque, según destacó, no estaba autorizada para hacer declaraciones.

Javier Zanón: «Ha costado mucho que la gente regresara a trabajar»

El portavoz del sindicato de controladores USCA en Balears, Javier Zanón, aseguró ayer que lamenta «profundamente todo lo que ha ocurrido en los aeropuertos» y aseguró que «ha costado mucho que la gente regresara a trabajar», ya que, tanto los controladores de Eivissa, «como la inmensa mayoría de este colectivo estaban dispuestos a entregar sus puestos de trabajo», es decir, a renunciar. «Como ahora somos los culpables de todo nadie va a mirar adónde debe mirar, habría que preguntarse quién es el culpable de mantener el conflicto de forma artificial», destacó Zanón, que aseguró que los controladores trabajan «prácticamente en esclavitud» y que nadie les hace caso. «Con este gobierno y esta empresa para la que trabajamos, hay que preguntarse cómo es posible que provocaran ayer (el viernes) por enésima vez a un colectivo que lleva demasiados meses así. Y antes de unas vacaciones de puente cuando se puede hacer después», se quejó Zanón, que insistió en que deben cumplir «300 horas más» de trabajo que el resto de los controladores europeos. Asimismo, destacó que el pasado viernes, cuando dejaron de operar, «había gente que estaba llorando y hombres con ataques de ansiedad y de desesperación». «Y en esas circunstancias no se puede trabajar, estamos hablando de seguridad aérea», agregó. «Ha sido muy complicado convencer al personal de que se vuelva a la normalidad y a la posibilidad de seguir negociando con alguien que nos está engañando sistemáticamente», insistió. Asimismo, el portavoz denunció seriamente la presencia militar en el aeropuerto de Palma porque, según aseguró, «a compañeros que estaban en su momento de descanso reglamentario, los llevaron a la sala de control a punta de pistola».

La Fiscalía de Balears ha incoado diligencias de investigación penal dirigidas a averiguar si las bajas masivas registradas entre este viernes y este sábado en los aeropuertos de Palma, Maó y Eivissa fuesen constitutivas de un delito de sedición, previsto y penado en el artículo 20 de la Ley Penal y Procesal de Navegación Aérea de 1964. Así lo ha informado en un comunicado el Fiscal Superior, Bartomeu Barceló, quien explicó que con la apertura de estas pesquisas se ha oficiado a la Guardia Civil para que investigue los hechos e identifique a las personas responsables de los mismos.

La Fiscalía abre diligencias en Balears