u Pepa Marí. La consellera de Política Turística, Pepa Marí, indicó que ha sido un «problema muy grave para mucha gente», aunque afortunadamente «no se han producido situaciones en las que haya entrado en juego la salud de las personas, de gente que tuviera que volar sí o sí y no pudiese». De hecho, aseguró que los vuelos para emergencias sanitarias se han garantizado. La consellera de Política Turística señaló que desde el Consell poco se puede hacer en una crisis de este tipo, aunque ayer estuvo todo el tiempo en contacto con el director del aeropuerto. «Me he puesto a su disposición en caso de que pudiéramos colaborar», indicó Marí, que también estuvo en contacto con las compañías marítimas, que le informaron de que han puesto todas las plazas a disposición, aunque prefiere «no entrometerse» porque las negociaciones las está llevando más directamente el Govern. La consellera confió en que el tráfico se restablezca completamente hoy e indicó que ahora habrá que vigilar cómo resarcen las compañías aéreas a los usuarios. También lamentó que esta situación ha provocado que miles de personas no hayan podido llegar a las Pitiüses, con las consecuencias turísticas que ello tiene. «Este fin de semana no arregla la temporada a nadie, pero era muy bueno para hacer una escapada a Eivissa», añadió Marí, que aseguró que la situación es menos grave que en verano, cuando hay vuelos a toda Europa. «En este caso las principales comunicaciones son con Madrid, Barcelona, Palma y Valencia y con tres de ellos hay conexión marítima, aunque no en las frecuencias deseadas, pero se ha podido mitigar un poco el efecto», aseguró la consellera, que indicó que estamos «más aislados que nunca». Respecto a la posibilidad de demandar a los controladores, indicó que si lo hace el Govern desde el Consell estudiarán si sumarse.

u Xico Tarrés. El presidente del Consell se mostró muy enfadado con esta huelga encubierta e indicó que todos los colectivos tienen derecho a hacer paros, «pero no de esta forma». En declaraciones a Radio Ibiza Ser, el presidente indicó que estudiará junto a los servicios jurídicos del Consell la posibilidad de demandar judicialmente a los controladores. De hecho, el Gobierno de Canarias presentó ayer una denuncia contra los controladores.

u Enrique Fajarnés. El diputado del PP lanzó duras críticas al Gobierno por su gestión en esta crisis. «Esto tiene graves consecuencias para Eivissa y para todos los que se iban de vacaciones», indicó Fajarnés, que aseguró que conoce el caso de un hotel que esperaba la visita de 120 personas y no ha llegado nadie. «Esto provoca un perjuicio económico muy importante», añadió el diputado, que lamentó la «actitud chantajista» de los controladores y la «mala gestión» del ministro Blanco, que no ha resuelto un problema que lleva mucho tiempo «enfangado». «No se pueden permitir este tipo de situaciones y por eso necesitamos un cambio de gobierno», concluyó Fajarnés, que lamentó que las Pitiüses sean «grandes perjudicadas», porque en la Península es posible moverse en coche, autobús y tren. «En cambio aquí se produce una sensación de aislamiento», añadió Fajarnés, que ha resultado afectado con este cierre, ya que tenía el billete para el viernes, tuvo que cambiarlo para mañana y finalmente para hoy.

u María Salom. El PP balear tildó ayer de «caos histórico» esta situación y reclamó al Gobierno soluciones urgentes a esta crisis que está ocasionando importantes pérdidas económicas. «Las aerolíneas pierden 80 millones por cada día que pasan sin volar; el sector hotelero ha cifrado en unos 20 millones las pérdidas en Balears; en nuestras islas el turismo es la primera industria, y la imagen de la marca España ha quedado muy tocada», lamentó la diputada popular María Salom, que aseguró que las Islas se han convertido en «una ratonera».