La encuesta presentada por el Institut d'Estadística de les Illes Balears (Ibestat) del Govern balear refleja que sólo el 44,2 por ciento de la población de más de 16 años habla «habitualmente» el catalán, mientras que en Formentera el porcentaje asciende hasta el 61,6 por ciento.
Así, el dato referente a la pitiusa mayor se convierte en el más bajo de toda Balears, al registrarse que el 47,5 por ciento de la media de las Islas habla habitualmente en catalán.
Asimismo, el estudio también desvela que sólo el 28,7 por ciento de los encuestados de Eivissa considera el catalán como lengua propia, mientras que el 49,7 asegura que la lengua propia es el castellano. Una minoría, el 4,3 por ciento de los encuestados en Eivissa apunta que tanto el castellano como el catalán son sus lenguas propias y el 17,2 por ciento nombra otras lenguas.
En Formentera, por su parte, el porcentaje de encuestados que considera el catalán como lengua propia asciende al 50,8 por ciento. El 34,3 por ciento asegura que es el castellano, mientras que el 4,1 por ciento asegura que lo son las dos de forma indistinta. El 10,7 por ciento de los encuestados en Formentera responde que otras son sus lenguas propias.
En relación a los conocimientos del catalán en la población mayor de 16 años hay que resaltar que sólo el 45 por ciento de los ibicencos encuestados sabe escribirlo y en Formentera la cifra desciende hasta el 47 por ciento. Asimismo, el 59 por ciento de los encuestados en Eivissa y el 73 por ciento de Formentera reconoce que sabe hablarlo mientras que los porcentajes referentes a los ciudadanos que entienden el catalán asciende hasta el 79 por ciento y el 91 por ciento en Eivissa y Formentera, respectivamente. En relación a la gente que sabe leer en lengua catalana se traduce en el 65 por ciento de los ibicencos y en el 73 por ciento de Formentera, según el Ibestat.
Entre las conclusiones de este estudio figura el hecho de que Balears conforman un «panorama ambiguo» en el que la sociedad isleña no ofrece un «comportamiento homogéneo», sino que hay ámbitos geográficos, grupos de edad u orígenes que determinan los hábitos sociolingüísticos. Aún así, se califica a Eivissa como una de las áreas en peligro de minorización de la lengua.