Los operarios trabajaron con rapidez para evitar la contaminación.

Los efectivos de Emergencias 112, bomberos y agentes de la Policía Local actuaron ayer en la calle Jaen de Cala de Bou que se vio afectada por un vertido de gasóleo que tuvo lugar al mediodía y que pudo ser controlado sin que llegara al alcantarillado o al mar.
Según informó el servicio de Emergencias 112 y Bomberos d'Eivissa, el derrame -cuya cantidad se desconoce- se produjo alrededor de las 14.00 horas en la calle Jaén de Cala de Bou, procedente de un colegio de educación primaria.
El vertido se produjo cuando se realizaba una trasvase de gasóleo de un depósito de 15.000 litros a otro en el centro educativo, por lo que se avisó de inmediato a Bomberos d que, a su vez, alertaron a Emergencias 112, que activó a todos los organismos competentes de la zona.
La Unidad Operativa de la Dirección General de Emergencias del Govern, con la colaboración de los bomberos, instalaron tres de sus vallas de absorción que, al parecer, lograron detener la llegada del vertido a la red de alcantarillado y al mar, según explican desde el 112.
Por el momento, «no se observan iridiscencias en el mar, lo que hace pensar que el derrame no ha contaminado las aguas», informó el Servicio de Emergencias del Govern.
El Ayuntamiento de Sant Josep también colaboró en las labores de contención y limpieza, bajo la supervisión de su concejal responsable de Emergencias, Angel Luis Guerrero, y con un técnico de la concejalía de Medio Ambiente que movilizó un vehículo de limpieza y otro de absorción que están retirando los restos.
Durante las operaciones, la Policía de Sant Josep de sa Talaia tuvo que cortar el tráfico en la zona