La Federación Empresarial Balear del Transporte (FEBT) pide a las administraciones públicas un mejor trato fiscal y a los mayoristas que les contratan el tráfico de mercancías y el movimiento de turistas en autocar que repercutan el alza de precio del carburante, que desde noviembre pasado a hoy roza el 6%. «Si no se incrementan las tarifas en origen nuestras empresas son inviables», afirmaron ayer los empresarios.
Descartando que sus «razonadas quejas» sean aviso de medidas tales como la huelga patronal, el presidente de la FEBT, Miquel Florit; el responsable de los transportes discrecionales, Rafael Roig; el primer directivo del transporte de mercancías, Joan Mayol, y el gerente de la patronal, Salvador Servera, explicaron ayer que durante los últimos cuatro meses el precio del gasóleo ha subido el 17,35%, «lo que equivale solo con ese concepto a un 6% de los costes de un vehículo y machaca nuestra ya maltrecha economía».
Revisiones
La FEBT insta tanto a las empresas que distribuyen carga como a las de transporte de viajeros -en el caso de Balears ello equivale a turistas- para que «apliquen la cláusula de actualización automática de los precios de los transportes de carretera a la que tienen derecho por sendas Órdenes del Ministerio de Fomento desde el año 2008».
En ese sentido Salvador Servera explicó que la revisión al alza «es obligatoria siempre que el combustible se encarezca al menos un 5% en un trimestre, salvo acuerdo expreso en contrario, y de hecho los contratistas pueden aplicarla en factura sin previo consentimiento del cliente».
Según la FEBT «estas cláusulas resultan una herramienta de gran utilidad para que no se produzcan pérdidas de poder adquisitivo para las empresas transportistas finales, que nos vemos sometidos a una fuerte inseguridad por las oscilaciones de precio del gasóleo debidas a circunstancias totalmente ajenas a nuestra actividad».

Carga impositiva
Conforme a los datos que maneja la Federacón Empresarial balear de Transportes, los gastos de combustible de todo tipo de camiones de mercancías y de toda clase de vehículos de transporte de pasajeros han experimentado un alza media del 19,19% en carburante en los cuatro últimos meses, ccomo onsecuencia de los 20 céntimos de euro de diferencia del coste por litro.
La variada repercusión en euros consiste en la diferencia de consumo medio, pues mientras un taxi puede registrar 8,5 litros por cada 100 kilómetros, un camión tractora con remolque bañera puede llegar a los 39 litros para el mismo desplazamiento.