Ayer, a las 00,21 horas, comenzó oficialmente una primavera que, en el caso de Balears, se espera que sea más cálida de lo habitual y con unas precipitaciones normales, con días de mucha lluvia y otros con poca, después que las islas hayan cerrado un invierno más frío de lo normal, con 0,6 grados menos en relación a la temperatura media entre 1971 y 2000.
Concretamente, entre diciembre y febrero, las temperaturas fueron 1 grado inferiores de media en Eivissa; 0,5 en Mallorca y 0,4 en Menorca, según informó el delegado territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Agustí Jansà, quien precisó que si se compara con el invierno del ejercicio pasado, las temperaturas no han sido tan inferiores, por lo que dijo que este año no ha sido «tan excepcional y ha registrado una temperatura bastante por encima del invierno 2005-06».
Respecto a las precipitaciones durante este invierno, Jansà reveló que el índice se ha situado en un 109%. Por otro lado, manifestó que, a consecuencia del cambio climático, en los últimos 40 años, las temperaturas de Balears han experimentado un aumento cercano a los dos grados, si bien en invierno el incremento no alcanza un grado.
Sin embargo, Jansà señaló que, pese a que la tendencia es que las temperaturas vayan subiendo en invierno, el periodo comprendido entre diciembre de 2010 y febrero de 2011 ha quedado por debajo de esta tendencia, debido a que han sido meses «bastante fríos».
Si se comparan las precipitaciones entre el 14 de marzo de este año y el mismo periodo de 2010, Menorca ha registrado un superávit del 45%, frente al déficit de un 25% por ciento en Eivissa.