Caterina Bianchi ha impartido un curso a Vane, las dos Carmen y Carolina (abajo). | DANIEL ESPINOSA

Hace tres años Caterina Bianchi llegó a Eivissa y puso en marcha un nuevo concepto de decoración de tartas que cada vez va teniendo más aceptación entre muchas ibicencas. De hecho durante este fin de semana está impartiendo un curso de ocho horas en el que Carmen, Vane y Carolina han aprendido a hacer obras de arte como las que es capaz de realizar esta italiana.

Algo que no es nada fácil, porque esta ex abogada es capaz de hacer piezas enormes y de gran calidad llena de figuras que asemejan más a esculturas que a dulces. De todas las que ha hecho durante su estancia en la Isla, la que recuerda con más cariño fue «una jarra voladora enorme que tardé mas de una semana en hacerla, y la presenté en la Feria de Bodas dejando a todo el mundo con la boca abierta».

Así, las cuatro se esmeraron por intentar aprender todos los trucos necesarios para sorprender a todos con sus creaciones. Y es que todas ellas coinciden que el mejor momento es cuando los niños ven las creaciones por primera vez, «habiendo incluso alguno que se echa a llorar cuando tienen que partir la tarta».

Y es que no hay que olvidar que detrás de tanto arte, tanta escultura, hay bizcocho, chocolate y sobre todo mucho azúcar.