La decisión del presidente de Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de no optar por tercera vez como candidato socialista a las elecciones generales en 2012, ha despertado diferentes opiniones entre los representantes políticos de la Isla y de Balears.
Por un lado, los socialistas de Eivissa coinciden en que es la confirmación de su compromiso de gobernar dos legislaturas, a la vez que alaban su gestión en el marco de la crisis económica. En el lado opuesto, los populares esperaban un anuncio de «elecciones anticipadas» y consideran que «se va no porque quiera, sino porque lo han echado», según indicó el presidente del PP balear, José Ramón Bauzá.
Entre las diversas opiniones, desde la Federación Socialista de Eivissa, su secretario general, Xico Tarrés, aseguró ayer que la decisión de Zapatero «entra dentro de la lógica, de lo que se podía esperar» y descartó que pueda influir en las elecciones autonómicas aunque «hay sectores que siempre quieren hacer ver que el que gobierna es el culpable». De igual forma piensa el diputado socialista Joan Boned, para quien el anuncio cierra la puerta a todo tipo de especulaciones porque había un interés de vincular la política estatal con la autonómica».
Por el contrario, el diputado popular Enrique Fajarnés consideró que la decisión de Zapatero es un intento de «desmarcar a los candidatos locales del desastre político que significa su gobierno» mientras que, desde Esquerra Unida (EU), su coordinadora Elva Alonso, consideró que el cambio de líder no cambiará la situación porque «es el partido el que está gobernando».