Un momento del acto celebrado ayer en Formentera. | Guillermo Romaní

El acto de confirmación pública de los candidatos por Sa Unió de Formentera al Consell y al Parlament, Javi Serra del GUIF y Juanma Costa del PP respectivamente, tuvo un total de cinco oradores, siendo el primero el presidente del PP de Formentera, José Manuel Alcaraz que comenzó deleitándose con «la gran noticia de que Rodríguez Zapatero no se presentará a la reelección 2012». Alcaraz afirmó que le habían dado tres minutos para hablar pero que no pensaba cumplir con ese límite, y cumplió su promesa y, eso sí, afirmó alto y claro que el PP, se supone que sa Unió, «no gobernará nunca con el PREF mientras Cándido Valladolid sea su presidente» lo cual arrancó una de las pocas salvas de aplausos que hubo a lo largo del acto.
Igualmente desde PP y GUIF, y lo recordaron posteriormente los candidatos de ambos partidos, Formentera recibió como herencia 25 millones de euros para infraestructuras, un convenio de carreteras con el Gobierno Central que sólo hacía falta firmar y unas cuentas saneadas mientras que ahora la herencia de GxF serán más de 5 millones de deuda con un plan de saneamiento, dijo Costa, que hicieron con dos años de carencia para que fueran los que ahora entren quienes tengan que comenzar a pagarlo.
Costa y Serra subrayaron que Formentera no puede gastar más de lo que ingresa, que es imprescindible recortar gastos e impuestos, reducir el personal público y potenciar a las pequeñas empresas, los comercios y el campo sin olvidar que el turismo es la principal fuente de la economía de la isla; pero al mismo tiempo le recordaron a Bauzá que Formentera es una isla especial y necesita más que el resto de las islas, por la triple insularidad y por sus peculiaridades específicas.

«Un cambio es posible»
Finalmente, Bauzá afirmó que «no hay forma de seguir de esta manera, necesitamos un cambio y Javi y Juanma han dado un paso adelante para hacer posible este cambio». Bauzá señaló que Balears es el paradigma de la inseguridad jurídica y hay que darle estabilidad y para ello apuntó los cuatro ejes en los que quiere actuar desde el Govern balear, economía, educación, turismo y comercio «porque con las cosas de comer no se juega».