El Tribunal de Arbitraje y Mediación de Balears (Tamib) hizo públicos ayer los datos referentes a su actividad en 2010, y lo hizo mostrando su extrañeza porque en las Pitiüses, a pesar de ser las islas que menos sufren la crisis «y con el hecho de que, incluso, en 2010 han creado empleo», la conflictividad laboral haya crecido un 14,57% respecto a 2009.
Eso sí, el Tamib apunta en sus conclusiones que «salvo que haya Expedientes de Regulación de Empleo puntuales, que influyan determinantemente en las estadísticas, es posible que la conflictividad en Eivissa y Formentera decrezca en 2011».
En concreto, el año pasado se recibieron 1.289 peticiones individuales de mediación por las 1.125 de un año antes. En el caso de los conflictos colectivos, estos han pasado de cinco a ocho.

Por sectores
Por primera vez este año se incluye un desglose de la conflictividad por sectores. La primacía del sector turístico dentro de la economía local queda patente ya que casi un tercio del total de las reclamaciones individuales de mediación (425) se corresponden a la hostelería. A continuación le siguen, a gran distancia, las de la construcción (234) y de los servicios administrativos y auxiliares (222).
En cuanto al tipo de expedientes, el 42% estaba ligada a reclamaciones de cantidad, impagos de algún tipo entre empleador y empleado en cantidades que oscilan entre los 1.000 y los 5.000 euros. Muy cerca se sitúan las extinciones de contrato, con un 41%, «por lo que se percibe que los conflictos derivados de despidos siguen siendo los más habituales».
En cuanto a la efectividad de los servicios del Tamib, los datos reflejan que sólo en el 35% de las mediaciones efectivamente realizadas ha sido posible llegar a un acuerdo.