ecía una estrofa de una conocida canción de un grupo de pop español Como hemos cambiado, que lejos ha quedado... y en el caso de la Semana Santa de Eivissa esto se podría aplicar a las mil maravillas, ya que ésta en los últimos diez años ha sufrido una gran transformación que la convierte en prácticamente irreconocible para muchos de los vecinos de la Isla.

La más destacable está sin duda en el número de procesiones que hay actualmente. Según Antonio Villalonga, presidente de la Cofradía del Santísimo Cristo del Cementerio (la más antigua de todas ya que data de 1890 y su imagen es de 1625), «antes se celebraba sólo la del Viernes Santo en la que todas las cofradías existentes salíamos de la Catedral para dar una vuelta al Paseo de Vara de Rey y terminar en Sant Elm».

Ahora, una década después, todo esto ha cambiado ya que además de la conjunta del Viernes Santo, hay una el Viernes de Dolores, una el sábado, dos el domingo de Ramos, una el lunes, una el martes y finalmente otra el miércoles.

Algo que según Villalonga se debe entre otras cosas a la llegada del actual obispo de Eivissa, Vicente Juan Segura, ya que «ha sido un fuerte impulsor de la Semana Santa en la Isla, reuniéndonos desde el primer momento a todas las cofradías y poniendo en marcha nuevas procesiones».

Cada vez más cofradías

En este sentido, en Eivissa han ido surgiendo nuevas cofradías como la última, la de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder. Ésta se creó en 2008 por mediación de la Casa Cultural Andaluza y su talla, un Nazareno de madera de cedro real policromada data de 2003 y es obra del escultor sevillano Jesús Méndez Lastrucci.

Por todo ello, el trayecto y el orden procesional de la conjunta del Viernes Santo se ha visto obligado a variar y ya no pasa por Vara de Rey donde antes se daba la vuelta. Pero no sólo marchan ahora por Vila. Según afirma Antonio Villalonga, «otro de los cambios más importantes también afecta a otras poblaciones ya que desde 2007 las cofradías de Vila salen a lugares como Formentera, Santa Gertrudis o Sant Jordi, multiplicándose así los actos de nuestra Semana Santa».

Todo esto se debe según el presidente del Santísimo Cristo del Cementerio a que, entre otras cosas, «ha habido una renovación en todas las presidencias de las cofradías, y porque los miembros de ellas y la sociedad han ido solicitando que la Semana Santa vaya renovándose de forma tranquila ».

Esto ha ido provocando que durante estos últimos diez años se haya formado una especie de Junta de Cofradías, que ha ido modernizando la Semana Santa mediante la publicación de un póster común, un folleto y logrando sobre todo la colaboración de las instituciones y el Ayuntamiento de Vila.

Gran futuro por delante

Así, el futuro, según Antonio Villalonga, es bastante atractivo para los ibicencos ya que se muestra convencido de que «viendo el éxito que está teniendo actualmente no hay duda de que se crearán en poco tiempo más cofradías en la capital».

En este sentido, se muestra de acuerdo con el obispo Vicente Juan Segura de que «es necesario para Vila un Cristo Resucitado que haga un encuentro en el Domingo de Resurrección con la Virgen María y cierre de manera espectácular nuestra Semana Santa».

Y hablando de un gran final, Antonio Villalonga lanza una idea que suena de lo más interesante para seguir mejorándola si se consigue la coordinación temporal necesaria entre todas y cada una de las participantes: «Como ahora la procesión del Viernes Santo es extremadamente larga y se tarda muchísimo en terminar, considero que en el futuro lo que se tendría que hacer es finalizar todas las cofradías a una hora concreta en la cara oeste de Vara de Rey donde el obispo pudiera dar una misa y todas las imagenes pudieran ser contempladas a la vez por todos los ciudadanos».