reunión entre Jáuregui y Serra también contó con consellers como Domínguez y Triguero.

El Consell d'Eivissa llevará adelante el proyecto de reforma del primer tramo de la E-10 diseñado por el anterior gobierno progresista, aunque intentará incrementar los 130 aparcamientos previstos hasta alcanzar las «400 o 500 plazas». Se trata de uno de los principales acuerdos adoptados ayer entre el presidente del Consell, Vicent Serra, y la alcaldesa de Vila, Marienna Sánchez-Jáuregui, que mantuvieron en Can Botino su primera reunión de la legislatura, en la que también estuvieron presentes consellers y concejales de ambas instituciones.
Según explicó Serra al término del encuentro, el proyecto elaborado por el gobierno de PSOE-ExC no se puede detener porque su tramitación «está muy avanzada», por lo que matizó que «las modificaciones que se hagan tendrán que ser contando con que estos pasos administrativos no se detengan». «Si hay algún cambio que ralentice el proyecto no lo haremos porque consideramos que es importante que no se detenga. Hemos hablado con los regidores y con la consellera Costa [de Mobilitat] y, en principio, creemos que el incremento no tiene porqué detener el proyecto ni ralentizarlo», destacó.
En este sentido, aunque indicó que la modificación aún tiene que ser estudiada por los técnicos, la idea es cambiar la ubicación de los aparcamientos que se proyectaban en línea. «Ahora lo que hemos establecido es cómo podemos ponerlos en diagonal para aumentarlos», agregó Serra, quien indicó que esta propuesta «en ningún caso» afectará al carril bici proyectado.


Avenida de Sant Josep

Cabe recordar que esta primera fase pretende iniciar la reconversión del primer cinturón de ronda en vía urbana con una reforma que se extenderá desde la rotonda de ses Figueretes hasta la de Can Misses. Además del carril bici y los aparcamientos, entre otras cuestiones, el proyecto incluye una explanada para viandantes en el centro de la vía con zonas ajardinadas, paneles solares y puntos de recarga para vehículos eléctricos.
Por su parte, la alcaldesa de Vila, Marienna Sánchez-Jáuregui, destacó que la ejecución del primer cinturón de ronda es «prioritaria» así como también «la posibilidad de optimizar el máximo de aparcamientos, que es uno de los problemas fundamentales».
Sin embargo, destacó que otra de las peticiones municipales tiene que ver con «un compromiso con los vecinos de Can Escandell como de Cas Serres y, en realidad, con toda la ciudad de Vila».
«Es la avenida de Sant Josep, la entrada a la ciudad de Eivissa, que creemos que es muy importante que se arregle aunque no está en esta fase», indicó Jáuregui, quien remarcó la necesidad de «acometer las obras de embellecimiento para hacerla más digna y más de acuerdo con lo que es la ciudad de Eivissa». «Queremos acometerla antes, incluso, que la primera fase [del primer cinturón] y están receptivos a que sea de esta manera», agregó.
En cuanto a otras cuestiones, como la apertura de la estación de autobuses, Cetis, la auditoría a las cuentas municipales, el futuro de ses Feixes o la reunión pendiente entre Autoritat Portuària, Consell y Vila para concretar la reforma interior del puerto, Jáuregui pidió más tiempo para dar respuestas. «Vamos a afrontar los temas que llevan doce años sin solucionarse, y lo vamos a hacer bien, pero nos tienen que dar un poco de tiempo. No llevamos ni los cien días todavía», justificó.

El presupuesto para el proyecto se mantiene

Vicent Serra aseguró que el presupuesto de 6,1 millones para la reforma de la vía se mantiene «y es el que saldrá a licitación». «Pediremos a los técnicos que intenten ajustar al máximo las repercusiones que puede tener el incremento de aparcamientos». Asimismo, indicó que, si bien en campaña electoral aseguró que esta primera fase era cara, explicó que ahora «parar el proyecto o hacer algún replanteamiento será peor».