Entesa Nacionalista y Ecologista de Eivissa (ENE) y PSM manifestaron ayer su disconformidad con el plan de sostenibilidad del Partido Popular, que plantea el recorte de 380 millones de euros, por la repercusión que esta rebaja pueda tener en el área de Salut. Las dos formaciones también se opusieron al intento de modificación del Partido Popular de la Llei de Funció Pública para que el catalán se convierta en un mérito y deje de ser un requisito para trabajar en la administración. ENE y PSM, además, exigirán que Eivissa tenga una política lingüística y por tanto, un delegado en esta materia en la isla.
Respecto al plan de saneamiento del Govern, Biel Barceló, secretario general del PSM-Entesa-Nacionalista y portavoz del grupo parlamentario , manifestó su preocupación a causa de que «uno de los recortes que ha trascendido es el hecho de cerrar las Urgencias de Puntos de Asistencia Continuada, lo que implicaría una saturación de los hospitales». Barceló declaró que este tipo de recortes deberían hacerse con «bisturí» y valorando detenidamente las consecuencias que esta acción pueda acarrear
Por otra parte, Maurici Cuesta, secretario general d'ENE declaró que se opondrán «rotundamente al anteproyecto de ley que pretende dejar el catalán como un mérito en el acceso a la función pública».
ENE y PSM, por otra parte, anunciaron que demandarán formalmente que la conselleria de Cultura disponga de una delegación y una persona con competencia y con resolución ejecutiva en Eivissa.