No faltó ni la procesión con el santo, ni la demostración de ball pagès ni las orelletes de todas las fiestas.

Llegó el 21 de septiembre y como todos los Mateos, la localidad de Sant Mateu d'Aubarca vivió ayer por todo lo alto su día grande.

La jornada comenzó con la tradicional misa y posterior procesión en la que participaron, junto a los vecinos, el presidente del Consell d'Eivissa, Vicent Serra, y la alcaldesa de Sant Antoni, Pepita Gutiérrez.

Junto a ellos también estuvo presente el obispo de Eivissa y Formentera, Vicente Juan Segura, ya de regreso en la Isla tras ser el gran ausente de las celebraciones del verano por estar de vacaciones en Valencia con su familia y en las Jornadas Mundiales de la Juventud celebradas en Madrid el pasado mes de agosto.

Tras ello, hubo demostración de ball pagès, en esta ocasión a cargo de sa colla de Sant Mateu d'Aubarca. Un baile que volvió a ser de lo más aplaudido por parte de los vecinos y de los turistas que acudieron hasta la plaza de la Iglesia, incluyendo unos cámaras de televisión, que nadie sabía a ciencia cierta de donde venían, pero que grababan cada una de las evoluciones de los miembros de esta colla.

Tras ello se repitió uno de los momentos más esperados de los vecinos en todos los días grandes: el reparto de orelletes y vi pagès, que hicieron las delicias de todos los presentes.

Finalmente la festividad siguió por la tarde con una fiesta en el centro social de Sant Mateu con la actuaciones de Cachirulo y sus amigos y la Orquesta Paradise.