Indignación sindical contra las medidas anunciadas por el conseller de Turisme

La celebración del Día Mundial del Turismo que desde hace seis años realiza la Federación de Comercio, Hostelería, Turismo y Juego de la Unión General de Trabajadores (CHTJ-UGT) y que ayer comenzó a desarrollarse en Eivissa, fue el marco elegido por varios de sus invitados para realizar duras críticas a la batería de medidas anunciadas recientemente por el conseller balear de Turisme, Carlos Delgado, y que, como anunció el propio conseller, conformarán una nueva Ley General Turística.
Ausente
Un conseller, Carlos Delgado, que por otra parte estaba invitado a la celebración de estas jornadas y que finalmente no acudió a la cita provocando el malestar de los organizadores sindicales quienes, por su parte, aseguraron que el encuentro se había ajustado a la agenda del representante de Turisme para poder contar con su presencia.
Sin duda, el anuncio de Delgado más comentado en el encuentro fue el que se refiere a la reconversión de plazas turísticas hoteleras en plazas o pisos residenciales. «Tenemos que explicarle al conseller que no queremos que el futuro del turismo en las islas provenga de la decisión de ningún iluminado, sino el fruto de la negociación con los trabajadores y los sindicatos», valoró en su discurso inaugural de las jornadas, el secretario general de UGT de Balears, Lorenzo Bravo, quien por otra parte consideró que Delgado «está en manos de especuladores y gente que quiere sacar beneficios de hoteles que ya están obsoletos». Para Lorenzo eso sería «un error estratégico que podemos pagar muy caro los trabajadores, la economía y la sociedad balear».
Para el sercretario general de UGT en las Pitiüses, Diego Ruiz, el cambio de uso de los establecimientos hoteleros es una «nueva oportunidad de hacer negocio sacrificando un modelo turístico que ha servido y sirve para mantener la estructura social de las islas y sigue dando ingentes beneficios a los empresarios».
En esto sentido, Ruiz exigió que «cualquier modificación de la ley turística balear se haga con el máximo consenso y la participación de los agentes sociales y económicos».
La que sí aceptó la invitación de los sindicatos y asistió a la celebración del Día Mundial del Turismo fue la consellera de Turisme de Eivissa, Carmen Ferrer, quien señaló que las críticas eran «de una parte del sector que están dudando de que estas medidas sean efectivas, pero hay que esperar un poco para ver el desarrollo y ver la efectividad de los anuncios del conseller balear.