El candidato a diputado por el Partido Popular Enrique Fajarnés. | Marco Torres

Enrique Fajarnés se presenta como número dos en la lista del PP balear al Congreso, candidatura con la que busca su tercera legislatura consecutiva en la Cámara Baja. Tras estar los últimos siete años en la oposición, está convencido de que «el cambio» que se avecina servirá para que las Islas «vuelvan a tener influencia en Madrid».

-¿Cuál es su programa electoral?
-Bueno, el programa se ha confeccionado, yo he sido coordinador de turismo a nivel nacional, y lógicamente los tiempos los lleva el presidente del partido Mariano Rajoy.

-¿Pero habrá programa o tendrá razón el PSOE de que su partido no quiere desvelar ni propuestas ni intenciones?
-Todo eso son las falacias y las excusas de mal pagador que tienen algunos partidos para escudarse y excusarse de su mala conciencia y de sus malas políticas que, en gran parte, han llevado al país a la situación económica en la que estamos. Nosotros vamos a basar nuestro programa en lo que hemos presentado en el Congreso los últimos siete años y también en el programa que llevamos en 2011 [elecciones autonómicas y locales].

-¿Y en concreto para Eivissa y Formentera cuáles serán las propuestas?
-Seguiremos, en primer lugar, defendiendo los intereses de los ibicencos y de los habitantes de Formentera en Madrid. Evidentemente aquí hay una serie de cuestiones que no están resueltas, como el transporte aéreo y marítimo, que es uno de los grandes problemas, o que las Islas en los últimos años no hayan tenido la influencia necesaria en Madrid para que vengan inversiones, que va a ser uno de nuestros puntales en las candidaturas.

-¿Se mantendrá la propuesta de aplicar un IVA reducido del 4% al sector turístico ?
-Sí, lo anunció el presidente del Govern balear y es una de las propuestas que mantenemos. España tiene que ser competitiva y para eso tiene que haber una serie de reformas estructurales que no se han hecho, como la reducción de las tasas aeroportuarias un 50% y un plan de conectividad aérea general, que concretamente es fundamental para nuestras Islas.

- ¿Entonces se puede esperar que arreglen los problemas históricos de conectividad de las Islas?
-El Govern está trabajando en ello y evidentemente con un cambio de gobierno, que es lo que deseamos y que estoy convencido que va a suceder partir del 20-N, vamos a trabajar en este sentido. No hay que perder la perspectiva de que primero hay que ver cómo nos dejan el Gobierno. Es una de las grandes preocupaciones porque, por desgracia, ya hemos visto que los socialistas han dejado las instituciones de comunidades autónomas arruinadas totalmente. Dicho esto, lo fundamental es recuperar la economía y la creación de empleo. Hay cinco millones de parados en España y once mil en Eivissa y Formentera. No hay mejor política social que la política de creación de empleo. Y en eso vamos a dedicarnos plenamente.

- Después del 20-N, si gobierna en PP, ¿la sanidad y la educación pública estarán garantizadas?
-En contra de las falacias y los discursos para sacar el doberman de la jaula, el Partido Popular garantiza la sanidad y la educación pública, porque para nosotros son temas vitales. Y cuando hablan de recortes sociales, qué mayor recorte social que dejar el país con cinco millones de parados.

- ¿Qué pasará con las leyes del aborto y el matrimonio homosexual?
-Bueno, el Partido Popular aún no ha adelantado lo que será el programa electoral y ahí irán cuáles son nuestras propuestas, que evidentemente ya hicieron cuando se plantearon estos proyectos de ley en el Congreso y en el Senado [El PP votó contra]. Sé que las cuestiones de todos los colectivos son importantes, pero no hay que desviar ni un centímetro la vista puesta en lo que es más importante en estos momentos. Estamos obsesionados con que España se recupere económicamente y se vuelva a recuperar el empleo. Pero con proyectos de ley que se han presentado nosotros vamos a ser coherentes y, evidentemente, habrá cuestiones que se rectificarán.

-¿Qué opina de los indignados?
- Es un movimiento que se produce con ideas y preocupaciones que pueden ser comunes a muchos españoles, y que en principio hay que respetar como cualquier otra idea. Yo creo que cualquier crítica, aunque sea contra el sistema y aunque yo no encuentro mejor sistema que el democrático, hay que valorarla y respetarla. Me preocupa el movimiento 15-M, pero me preocupan más los cinco millones de parados, porque esos sí que están indignados. Pero espero que este movimiento no se politice.

-¿Qué propuesta habrá en la Cámara para reducir privilegios a los políticos?
- Eso es un debate falso y me recuerda a la época franquista, que se hablaba siempre mal de los sistemas democráticos, de los partidos y de los políticos. En fin, a mí eso me preocupa muchísimo porque es ir contra el sistema. Además hay que decir, qué privilegios y de qué políticos. Que hay que regular y adelgazar la administración, un ejemplo es lo que hizo Bauzá que redujo a la mitad las 170 empresas públicas que había en la comunidad. Pero hay que decir la verdad, cuando se habla de los políticos que tienen privilegios, al final se está haciendo daño al sistema democrático de partidos que hay en estos momentos. Que habrá que regular en todas las administraciones públicas los sueldos, yo soy partidario de una regulación para que no fuese a libre albedrío de cada institución lo que cobra uno y lo que cobra otro. Pero bueno, esto excede a mis competencias.

-Una de las cuestiones que suscitaron debate es el complemento para cobrar la pensión máxima al que tienen acceso los diputados que sumen once años en el escaño y a la que usted podrá optar ya que será su tercera legislatura como diputado.
- Pero es que esa es una de las grandes falacias. Había unas escalas y, por ejemplo, a partir de once años, cuando uno se jubila si no llegas al máximo, la Cámara te compensaba esa parte. Es decir, en estos momento hay 80 diputados que se les compensa con 30 o con 40 euros. Esto es lo que había, y ha habido unas reformas en las que además se han quitado cuestiones como estas. Vuelvo a repetir, esto me recuerda tiempos pasados, que algunos con cierta edad vivimos, y en los que siempre se machacaba a la clase política, y que además es muy lamentable y salen de determinados sectores políticos que justamente no son de derecha ni de centro derecha.