Para esta mañana se espera el inicio de los trabajos en la vía de circunvalación de es Pujols, la vía perimetral como ahora se la denomina, que debe descongestionar el tráfico dentro del núcleo urbano y al mismo tiempo habilitar entre 250 y 300 espacios de aparcamiento a lo largo de toda la vía.
La semana pasada se efectuó el replanteo de los trabajos y para ayer se esperaba iniciarlos, aunque un retraso en la llegada de la maquinaria obligó a posponer un hecho de suma importancia para es Pujols y para toda Formentera.
Junto con la remodelación de la Plaza Europa, otro proyecto emblemático, es Pujols experimentará en 2012 un cambio absolutamente revolucionario para mejorar su oferta turística.
Del proyecto de una vía de circunvalación en es Pujols se habla desde hace tres décadas, ya que fue a finales de los 70 cuando se comenzó a plantear y dar los primeros pasos para hacer de esta infraestructura viaria una realidad. Curiosamente han ido pasando legislaturas de todos los colores políticos, siempre ha sido un tema prioritario y no es hasta ahora cuando por fin la vía perimetral será una realidad.
Soterramientos
Aunque se trata de un tramo relativamente corto, medio kilómetro aproximadamente, la vía de circunvalación de es Pujols ha sufrido innumerables retrasos debido a los enfrentamientos entre los propietarios de los solares por los que discurrirá la vía con las diferentes administraciones. Los trabajos a realizar comportan inicialmente la supresión de todos los tendido aéreos, en lado sur de la vía habrá un amplio boulevard de seis metros de anchura con arbolado y jardineras, zonas verdes a ambos lados de la vía, muretes de piedra separadores y una acera de 2,3 metros en la zona norte.
En la zona norte de la vía se habilitarán entre 250 y 300 aparcamientos para vehículos. Asimismo se habilitarán dos rotondas sobre la PMV-820-2 en el lado este sobre la Avenida Miramar en su intersección con la calle Xaloc y la otra a la salida de es Pujols en dirección a la Savina.
Las obras tienen un coste de 2,85 millones y han sido adjudicadas a Tragsa. El plazo de ejecución de las obras es de seis meses por lo que deberían estar finalizadas antes de la llegada de la temporada alta veraniega.