Angels Martínez explica a los alumnos de ESO como siente y vive una persona ciega

Que una persona ciega no lo tiene nada fácil en su vida diaria es algo que comprueban en primera persona todos los años los alumnos del instituto Xarc de Santa Eulària gracias a la iniciativa Antifaç i rodes.

Así, por quinto año consecutivo ayer era el día de ponerse el antifaz, coger el bastón y, acompañados de un amigo para hacer de guía, experimentar las sensaciones que vive una persona invidente.

Y todo con la intención, según Vicky Alemany, profesora del centro e impulsora del programa, de que «estos chicos y chicas que serán nuestro futuro tengan en cuenta las características especiales que puede presentar la población y lograrlos concienciárlos lo más posible».

Por eso los jóvenes que se ponen en la piel de las personas ciegas no sólo discurren por el instituto sino que también salen a las calles de Santa Eulària. No en vano, según Vicky, «la idea es que estos jóvenes de bachillerato tengan el mayor tiempo posible el antifaz para que se pongan en el papel de las personas ciegas y se den cuenta de las dificultades que encuentran en su día a día».

Así, ayer en los alrededores del centro o la cafetería, muchos de ellos intentaban apañárselas como podían para comer un bocata sin ver nada o para no darse con una puerta al salir. «Es una sensación difícil de digerir pero creo que sólo así podemos sentir lo que realmente sienten ellos», aseguraba una de los 60 estudiantes que participaron mientras intentaba no caerse por las escaleras del patio ayudada por sus compañeros.

Y es que uno de los puntos más importantes de este proyecto, además de concienciar a los jóvenes sobre las barreras que encuentran día a día las personas con discapacidad, es, según la profesora, «trabajar la confianza en los demás, pues los estudiantes que llevaban los ojos tapados cuentan con la ayuda de un compañero o compañera que les guiaba en su camino y se tienen que fiar en todo momento de él».

Además, ayer Vicky estuvo acompañada por Angels Martínez, maestra y técnica de la ONCE, quien también se encargó de explicar a los alumnos de Primero de ESO todo lo referente al mundo de la discapacidad visual. Algo que hizo de forma muy interactiva explicando aspectos como los gestos que hace el guía a su acompañante cuando se encuentra ante una escalera o un sitio estrecho o la altura que tiene que tener un bastón