La Asociación Empresarial de Automoción de Ibiza y Formentera (AEMA) publicó ayer los últimos datos sobre matriculaciones de 2011, donde el año se cerró con una caída global del 13,37% en las Pitiüses, aunque en diciembre las ventas a particulares aumentaron un 56,8% respecto al mismo mes de 2010. Sin embargo, las ventas a particulares cerraron el ejercicio con una caída del 21,5%, mientras que los ‘Rent a car' cayeron un 8,6% y los vehículos comerciales un 6,8%. «Los datos son malos, pero si los comparamos a nivel nacional donde ha habido un descenso generalizado del 17,7% y en cuanto a particulares el descenso ha sido superior al 33% vemos que hay doce puntos a favor de las cifras pitiusas. Esto se debe a que nuestra principal empresa, la turística, sigue funcionando y esto beneficia a las cifras de ventas», explicó Roberto Pereyra, presidente de AEMA, que puntualizó: «El turismo en las Pitiüses y en Balears sigue funcionando y cuando se puedan arreglar las restricciones crediticias y haya un marco de seguridad económica seremos de las primeras comunidades en salir de la crisis».

Pereyra espera que a partir del segundo semestre del año se produzca un despegue paulatino de las ventas en el sector, pero para ello es necesario un plan de incentivos para fomentar las ventas. «Al ser compras importantes y al no tener tanta facilidad para acceder al crédito la gente se lo piensa más, por ello esperamos un plan de incentivos para reactivar las ventas de vehículos», concluyó.