El hospital Can Misses de Eivissa ha registrado una presión asistencial en la segunda quincena de enero en comparación con el mes de diciembre, según aseguró ayer un portavoz de la Gerencia del Área de Salud.
De hecho, con las camas cerradas de la tercera planta se ha pasado de una veintena de camas libres a una media de cinco. Sin embargo, el hospital no ha decidido aún reabrir las camas de la tercera planta. «No es necesario hacer todavía la apertura», añadió un portavoz. Ayer, por ejemplo había 14 camas libres a primera hora de la tarde.
Tras el cierre de las camas de la tercera planta, el Sindicato de Enfermería ha pedido un refuerzo de enfermería por la noche en Urgencias ya que sólo hay una profesional para los pacientes pero el aumento de la presión supone que la profesional tiene que atender a los pacientes en pasillo y a los que están en la sala de observación pendiente de ingreso hospitalario. De momento el hospital no contempla más contrataciones. «No se tiene la percepción de que haya esa carencia», dijo un portavoz ante la petición sindical, que recordó que el verano pasado hubo un refuerzo en julio y agosto. No obstante, aseguró que «en momentos puntuales, como los de los días 17 y 18, se hizo un apoyo de enfermería de otro servicio», comentó.
La unidad de hospitalización con 14 camas de la tercera planta lleva cerrada desde primeros de diciembre dentro de las medidas de eficiencia de la Conselleria de Salut. La Gerencia ha asegurado que el servicio se abrirá cuando sea necesario y mantienen que los picos de ocupación registrados a mediados de enero son hechos puntuales.