Los lunes los estudiantes del colegio público de Santa Eulària tenían que llevar un zapato diferente cada uno. El martes un pañuelo largo y una corbata, además de no olvidarse sus zapatos de modelos distintos. Ayer, un gorro o un sombrero, unido a todo lo anterior... y así hasta completar mañana viernes su disfraz.

Todo ello bajo la atenta mirada del Rey del Carnaval, un peculiar personaje que, ataviado con un sombrero de bombín rojo, una peluca rosa y, sobre todo, mucho sentido del humor, fue recorriendo todas las clases haciendo las delicias de todos los alumnos del centro que lo miraban alucinados con una gran sonrisa.

«Es una iniciativa que se repite de forma ininterrumpida desde hace 12 años siempre que llega esta época y durante todo este tiempo se ha convertido en una tradición muy divertida que les encanta a todos los estudiantes del centro», aseguraba ayer Diego Romero, coordinador del ciclo de Infantil de este colegio público, vestido también para la ocasión tal y como indicaban las normas del juego.

Y es que durante toda esta semana este centro de Santa Eulària respirará Carnaval por cada una de sus paredes con diferentes actividades, como el tradicional Dijous Llarder de hoy, en el que se prepararán tortillas y los niños tendrán que venir vestidos de mariol·los con ropa antigua que les dejen sus familiares, o la fiesta de Carnaval que se celebrará durante la mañana del viernes en el colegio y en la que habrá premios para los mejores disfraces de cada una de las clases del colegio.

Además, todos los niños del ciclo de Infantil participarán en la rúa de Carnaval de Santa Eulària, que se celebrará el próximo martes 21 de febrero por la tarde por las calles del pueblo. «Este año hemos pensado que los pequeños de tres años fueran vestidos de piña, los de cuatro de fresa, y los de cinco de manzana, y por eso algunos de los profesores ya llevamos tiempo preparando los carteles y las carrozas que formarán parte de la comparsa», aseguraba el propio Diego mientras alguna de sus compañeras, en compañía de algunos alumnos de Infantil, pintaba una enorme fruta en el pasillo junto a la puerta de entrada del colegio.

Porque de la confección de los trajes frutales se tienen que ocupar los padres basándose en unas mínimas nociones que les han dado los propios profesores, con el fin de que, como afirmaba Diego, «luego cada familia pueda venir de 14,00 a 15,00 al centro a hacer los trajes con total libertad y como ellos quieran».

Coreografía de moda

Además, las pequeñas frutas del colegio público de Santa Eulària no sólo se limitarán a desfilar sino que también han preparado una coreografía conjunta entre todos los cursos en la que bailarán al ritmo de la canción de moda Ai Se Eu Te Pego, del cantante brasileño Michel Teló.