La próxima semana se retomará la construcción del colegio de Sa Bodega tras once meses de paralización. El conseller balear de Educació, Rafael Bosch, anunció ayer en la sesión del Parlament que el reinicio de los trabajos tendrá lugar, concretamente, «el lunes que viene» con el objetivo de que esta edificación «sea una realidad cuanto antes».
«Si no hay nada nuevo y si Dios quiere, como me gusta decir a mí, esta semana firmaremos con la constructora el proyecto de modificado y el lunes que viene se reanudarán las obras», aseguró el conseller en respuesta a una pregunta de la diputada popular Carolina Torres, que pidió a Bosch que explique «los trámites efectuados para impulsar el proyecto de Sa Bodega y en qué situación se encuentra». «Muchos ciudadanos de Eivissa preguntan qué pasa con las obras de este centro y cuándo comenzarán de nuevo», destacó la diputada, y remarcó que «también la alcaldesa de Vila Marienna Sánchez-Jáuregui expresaba su preocupación por las obras del colegio hace unos días en los medios de comunicación».
En cuanto a la tramitación, Bosch recordó que este nuevo centro «de dos líneas fue adjudicado por 2,6 millones y el 21 de marzo se paralizó por los hallazagos arqueológicos». «Tuvimos que contratar la redacción y dirección del nuevo proyecto modificado. Aparte hubo que negociar y encontrar crédito para lo que supone más de 250.000 euros de modificado que realmente no estaba previsto. Haciendo un esfuerzo en la reorganización del crédito, se ha llegado a un acuerdo con la constructora», relató Bosch.
Por su parte, Carolina Torres aseguró que «comprende la inquietud de los ciudadanos y de la alcaldesa porque su antecesora [Lurdes Costa] anunció muchas veces el comienzo de las obras de Sa Bodega sin iniciarlas y, cuando empezaron, el hallazgo de restos arqueológicos retrasó la ejecución de este proyecto». «Y todo el mundo está un poco a la expectativa», remarcó la diputada.

El cese de Leciñena fue por desacuerdos en la organización de Urgencias

La consellera de Salut, Carmen Castro, insistió ayer que María Ángeles Leciñena fue destituida como jefa del servicio de Urgencias de Can Misses «por motivos organizativos». «En las continuas reuniones que ha habido con la Gerencia ella no ha aceptado cambiar la organización de Urgencias», destacó Castro, quien explicó que Leciñena «mantenía a dos facultativos por la mañana», el turno con mayor cantidad de personal, cuando «en realidad se tienen que reforzar las tardes». A causa de la falta de acuerdos «se ha tomado la decisión del cese», agregó, y recordó que «Leciñena fue gerente del hospital y cuando llegó cesó al doctor Carlos Rodríguez Vidal, que había sido nombrado por la anterior gerencia».
Así respondió a las acusaciones de la diputada socialista Pilar Costa, que aseguró que «las decisiones y rectificaciones» de Castro «están creando una inseguridad monumental» y dimisiones «demasiado importantes, como la del responsable médico de Son Espases». «Y los que no dimiten, ustedes los cesan por motivos políticos, como es el caso de la señora María Ángeles Leciñena», criticó Costa.

Delgado busca la viabilidad de privatizar los puertos baleares

El conseller de Turisme, Carlos Delgado, rechazó ayer la petición de diputado socialista Marc Pons para que «mantenga el planteamiento de la gestión pública» de los puertos de Balears, entre los que se encuentra el de Sant Antoni, y no los privatice. En respuesta, Delgado señaló que se está estudiando la viabilidad de que los 13 puertos de gestión directa que tiene Ports de Balears pasen «a gestión indirecta». «No es exacta la voluntad de privatizar, sino de hacer estudios y una vez los tengamos tomar las decisiones oportunas», destacó.

La nueva oficina del SOIB de Formentera, para el verano

El conseller de Educació, Carles Bosch, aseguró que las nuevas dependencias del SOIB en Formentera, «si no hay inconveniente, se abrirán antes de verano». El diputado por Formentera Jaume Ferrer criticó que ya están equipadas y que desde hace nueve meses permanecen cerradas a pesar de que el Consell de Formentera «paga el alquiler de las antiguas dependencias y la mitad del de la nuevas». Bosch recordó que en 2010 no se pagaron las certificaciones a la constructora y que, por ello, la apertura está retrasada.