IBIZA CONCENTRACION 15M IBIZA TOMA LA PLAZA

Fueron muchos los que optaron por mostrar sus mensajes en pancartas.

María José RealEivissa12/05/12 0:00
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Rocío Mudarra tiene 37 años y una hija de cuatro meses. Ambas acudieron ayer a Vara de Rey con su sombrilla ‘indignada’ para participar en la conmemoración del primer año de vida del movimiento social por el cambio del 15M, que en Eivissa tomó forma a través de Ibiza Toma la Plaza (ITLP). En esta sombrilla se podían leer pensamientos como «no a la monarquía, que se va a la cacería», «no más corrupción, chorizos» o «dejadnos vivir; nos estáis estrujando». Rocío tiene claro que lo que más le preocupa es su futuro, pero sobre todo el de su pequeña. «Me preocupa hacia dónde estamos yendo con todos estos recortes. Creo que la solución sería empezar de nuevo», explicó esta cordobesa.

Igual que ella, cientos de personas se congregaron ayer en Vila para participar en la celebración. Entre ellas, Miguel que el año pasado participó en la gestación del movimiento ITLP. «En Ibiza Toma la Plaza hemos trabajado mucho este año organizando, por ejemplo, ágoras de educación de la que surgió la plataforma Pitiüses per l’Educació, hemos organizado mercadillos sin dinero, hemos lanzado una publicación digital y seguimos trabajando a nivel local organizando asambleas para tratar las problemáticas que afectan a Eivissa». En este sentido, Miguel aseguró que próximamente tratarán en asambleas y organizarán un debates sobre territorio y urbanismo. Además, explicó que, echando la vista atrás, «estamos peor que hace un año».

La concentración arrancó con una sonora cacerolada a la que siguió una performance de El xirinugito Teatre en la que criticaban la explotación laboral que ejercen las grandes multinacionales en países en vías de desarrollo. Más tarde leyeron el manifiesto en el que recalcaron que si bien ha habido cambio de gobierno «sus políticas siguen siendo las mismas», al tiempo que reivindicaron la necesidad de «resistir y ser creativos para construir alternativas reales que contribuyan a mejorar nuestras sociedades». En el texto, además, reivindicaron «un cambio de conciencia». Más tarde surgió espontáneamente el dar la vuelta a Bartomeu Roselló y regresar a Vara de Rey.