Después de que el líder del sector crítico del PSOE, Pedro Campillo, propusiera hace unos días elegir al nuevo secretario general de los socialistas ibicencos mediante el sistema de primarias francesas (para que puedan votar todos los militantes y simpatizantes) no dejan de sucederse las opiniones a favor y en contra del sistema.

El candidato oficialista, Vicent Torres, dijo ayer que una cosa es que le pueda gustar más el sistema de «un militante, un voto» y otro que realmente se pueda hacer por los estatutos. «Siempre he dicho que me parecía bien hacerlo por primarias, aunque hay que recordar que ahora todos los militantes pueden votar, aunque votan primero a un delegado», dijo Torres, que recordó que «hay que cumplir el reglamento».

Sentimiento general

«No creo que debamos debatir en los medios, sino en los congresos, que es cuando decidimos nuestras normas internas», añadió el oficialista, que si sale elegido defenderá las primarias. «Yo creo que ya es un sentimiento general, nuestro partido ya se ha dado cuenta de que la militancia ha pedido procesos más abiertos. El proceso actual tampoco debemos criticarlo, porque es muy democrático y da plena capacidad a todos los militantes aunque sea por delegación», señaló Torres, que cree que hay que «aceptar las reglas».

El líder del sector crítico, Pedro Campillo, explicó que es perfectamente legal convocar primarias y que otras federaciones lo hacen. «La gestora decide cuántos delegados hay por equis militantes y puede decidir que todos los afiliados sean delegados y puedan votar», indicó Campillo, que cree que también se puede dejar votar a los simpatizantes pidiendo un permiso a Madrid.

«Lo que ocurre es que han hecho tantas trampas que creen que tienen el congreso cogido, aunque sea con hilos, y saben que no ganarían si votara toda la militancia», criticó Campillo, que cree que los oficialistas siempre intentan ganar en los despachos». «Practican lo contrario a la transparencia, no tienen voluntad, prefieren la magarrufa y el regate en corto», añadió.