Una alumna recoge el diploma del año pasado de manos de Belén Torres y en presencia de Ferrer Abárzuza y Vicent Serra. | (c) Sergio G. Canizares

El Consell d’Eivissa acogió ayer la inauguración del curso de la UNED que corrió a cargo del director de la institución en Balears, Miguel Ángel Vázquez, además de contar con una conferencia del historiador ibicenco Antoni Ferrer Abárzuza bajo el título ‘Joan Marí Cardona: un nuevo rumbo en la historiografía pitiusa. A los diez años de su muerte’.

Vázquez destacó que la oferta educativa de la UNED en Eivissa se centra en 27 grados, el curso de acceso a la universidad y un «amplio abanico de estudios propios». Ante la continuación del proceso de matrículas, el director del centro en Balears no pudo concretar la demanda existente aunque avanzó que el número de estudiantes de grado aumenta entre un nueve y un diez por ciento, en comparación con el curso pasado.

Asimismo, y como no podía ser de otra manera, la UNED también es una de las víctimas de las crisis: «Hay retrasos en las aportaciones del Consell, que representan el 30 por ciento del presupuesto, aproximadamente, y a día de hoy no se ha recibido la aportación de 2012. Estamos a la espera de que se pueda percibir próximamente a efectos de una normalización del funcionamiento del centro», indicó Vázquez, quien indicó que, por ahora, estas deudas no hacen peligrar la oferta educativa aunque sí generan «incertidumbre».

«Sin duda es una satisfacción para el centro que la demanda crezca, sinónimo de satisfacción de nuestros usuarios o clientes. Las cifras crecen en todos los ámbitos y los recursos se congelan o se reducen, una combinación muy difícil de soportar y que nos debe hacer reflexionar [...]. Muchas veces funcionamos con la ilusión, pero el trabajo bien hecho requiere su recompensa como cualquier otra actividad», apuntó en su discurso Vázquez.

Por otro lado, el director de la UNED en Balears reconoció que el espacio que ocupan, en el edifico de Cas Serres, es «adecuado» para el centro «mediante la utilización de aulas de distinta capacidad y con la aplicación de la tecnología digital en la emisión de las clases por internet». Y es que el objetivo que persigue la UNED es que el apoyo docente llegue al máximo número de estudiantes matriculados, independientemente del lugar de residencia y de sus obligaciones personales, mediante la consolidación de clases y tutorías por Internet. «Sin duda es una ventaja muy significativa para el estudiante de Eivissa por la gran dispersión de estudiantes en las distintas titulaciones», indicó Vázquez.