El informe técnico realizado por la arquitecta municipal del Ayuntamiento de Sant Antoni, Araceli Pelluz, concluye que la licencia de obras otorgada por la junta de gobierno al exconcejal de Deportes, Vicente Cabezas, era ilegal. Según destaca en su escrito, el bar Es Puig, propiedad del exedil, es una edificación que se encuentra «fuera de ordenación, por lo que no se puede otorgar ningún tipo de obras en la misma». Además, señala que «no es legalizable porque incumple los parámetros de la normativa vigente (PGOU)» y recomienda una inspección al local para continuar con los expedientes de disciplina urbanística «como corresponda» así como para realizar un informe «sobre la actividad que se está desarrollando en la edificación».

El informe fue elaborado por la arquitecta municipal a petición del secretario de la Corporación, Joaquín Granero Fernández, después de que la alcaldesa Pepita Gutiérrez le acusara ante el Govern balear de «deslealtad» y pidiera la apertura de un expediente disciplinario porque Granero dio su conformidad a la licencia en la junta de gobierno, que se celebró en junio, pero un mes más tarde incluyó un informe de desestimación en el expediente sin advertirlo a Alcaldía ni a Urbanismo, según el equipo de gobierno. Granero se defendió mediante una carta remitida a la alcaldesa en la que asegura que sí le había advertido de la ilegalidad de la licencia, y en la indica que en un primer momento aprobó el permiso de obras porque le faltaba información.