Pedro Pizá Caffaro y Luis Martín Soledad, recibiendo los premios Ramon Llull el pasado jueves.

Han hecho de todo. Desde traer niños al mundo hasta autopsias y llegaron incluso a renunciar a algunas de sus vacaciones porque no había sustitutos antes que dejar desasistidos a sus pacientes de Formentera. Se trata de los doctores Luis Martín Soledad y Pedro Pizá Caffaro que durante casi 20 años fueron los únicos médicos de Formentera. Ahora, a pocos años de su jubilación, han recibido el Premi Ramón Llull por una vida dedicada a la atención médica de los ciudadanos de Formentera al entender la profesión médica desde su dimensión más humana y de servicio a la comunidad. No es el primer premio que reciben sino que también han sido galardonados por el Colegio de Médicos y el Ayuntamiento de Formentera.

Desde sus consultas como médicos de cabecera, a pocos años de jubilarse, se muestran satisfechos por este galardón. «A veces me siento como si fuera un Nobel», dice bromeando el doctor Martín Soledad. «No sé si merezco este premio, pero he hecho mi trabajo que tengo la suerte que me gusta y en un sitio ideal como es Formentera», dice. «Es un reconocimiento a la cantidad de años que llevo trabajando en la isla y me alegro de ello» añade el doctor Pizá, que reconoce que le hace ilusión «la gente que por la calle me felicite por el premio».