La organización conservacionista Oceana ha asegurado hoy que los fondeos irregulares de embarcaciones en el Parque Natural de Ses Salines de Formentera han provocado que las anclas hayan arrancado un 20 % de las praderas de posidonia oceánica, especie protegida, en esta zona.

Un informe científico al que ha tenido acceso la organización internacional ha hallado disminuciones de más de una quinta parte de la superficie de posidonia entre 2008 y 2012 en el norte de Formentera, ha informado Oceana en un comunicado.

Este retroceso ha sido causado por decenas de embarcaciones que fondean ilegalmente sobre posidonia y arrancan las plantas con el ancla.

Oceana ha recordado que la posidonia es un hábitat protegido por la Unión Europea y la pradera del Parque Natural de Ses Salines, donde se realizó el estudio, fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1999.