El concejal de Urbanismo de Sant Josep, Javier Marí, aseguró ayer que el Ayuntamiento de Sant Josep «ha hecho lo que tenía que hacer» en el caso del derribo de la casa ilegal de Puig d’en Serra. «Hemos pedido entrar para poder demoler y estamos esperando a que nos autoricen», indicó Marí, que explicó que todo está pendiente de la resolución de recursos presentados por la propiedad, que está intentando impedir el derribo.

El Grup d´Estudis de la Naturalesa (GEN) anunció hace pocos días que se ha personado en la causa judicial con la finalidad de que «se deje de burlar la ley y se ejecute la sentencia que obliga a derribar el inmueble». Los ecologistas amenazaron con pedir en los Juzgados que se impongan sanciones, incluso «de tipo penal», contra los responsables políticos hasta que no se cumpla la sentencia.