Los investigadores del Grupo de Ecología Interdisciplinaria del Departamento de Biología de la Universitat de les Illes Balears (UIB) analizan el estado ecológico de cuatro playas de Santa Eulària con el objetivo de prevenir la alteración de la calidad de las aguas.
Este programa de vigilancia se hace en las playas de Santa Eulària, es Riu, es Canar y Cala Llonga, y ha sido encargado por la concejalía de Medio Ambiente en el contexto de la aplicación de la Agenda 21 y los Sistemas de Gestión Ambiental ISO 14001 implantados en las playas.
El Consistorio es «pionero» en este tipo de estudios entre los municipios costeros del archipiélago balear, según indicaron desde la UIB.
«El objetivo es conocer de antemano la presencia de especies de algas y cianobacterias que puedan generar proliferaciones y discoloraciones de la columna de agua de la zona de baño y alterar su calidad. Y, en caso de que éstas se produzcan, analizar cuáles son los organismos responsables, sus características biológicas y ecológicas, las posibles causas que han desencadenado el proceso, y las consecuencias sobre el conjunto del ecosistema», apuntaron en un comunicado.
El trabajo tiene un valor añadido, porque los análisis cualitativos de las muestras permitirán elaborar un catálogo de algas que servirá de referencia para futuros trabajos sobre las zonas de baño.
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