En la imagen, Guiem se prepara para rematar en un lance de la primera mitad.

SAN RAFAEL: 0

PLATGES DE CALVIÀ: 0

La fortuna le giró la cara ayer al San Rafael en un encuentro que de cualquier otro modo podría haber concluido en goleada para el combinado local. El desacierto de cara a gol de los atacantes ‘blues’ y la tenacidad de la retaguardia del Platges de Calvià resultaron decisivos para que el encuentro finalizara sin goles.

Necesitaba reencontrarse con el gol y, sobre todo, con la victoria el colectivo de Vicente Román, que llegaba al tercer envite liguero con el casillero vacío y cierto nerviosismo en sus filas. Pronto tomó la manija del encuentro empujando hacia su área a un temeroso Platges de Calvià. Tal fue el empeño del San Rafael que no tardaron en sucederse los saques de esquina y las faltas rondando el área mallorquina. No estuvieron acertados los lanzadores pitiusos en los primeros libres directos, si bien los síntomas de la propuesta local eran muy positivos y hacían presagiar éxitos inmediatos.

A la media hora de juego, el visitante Tomás sacó bajo palos un remate de Morales tras el despeje del guardameta a un primer cabezazo de Guti. Poco después, Vicent se sacó de la chistera una asistencia de gol para Guiem, dejando pasar el cuero entre sus piernas, que no aprovechó el mediapunta mallorquín.

La valentía y la ambición del equipo anfitrión merecían premio ante un ultradefensivo Calvià que tan solo gestó un disparo a puerta, sin consecuencias, a los 36 minutos de juego. En la recta final del primer episodio incidió el cuadro local a balón parado y a punto estuvo de inaugurar el marcador. Guiem cazó un remate tras un saque de esquina que volvió a rechazar la zaga rival desde la misma línea de cal.