A principios de 2010 finalizaron las obras de la escoleta de Can Nebot, en Sant Jordi, y después de todo este tiempo el Consell todavía no ha encontrado una solución para poder abrirla.
Según aseguran desde la máxima institución insular, «se sigue trabajando para buscar fórmulas para poder ponerla en marcha». El conseller d’Economia, Álex Minchiotti, ya advirtió en el pleno del mes de septiembre de la imposibilidad de abrir puertas según un informe del interventor. El problema es que no se puede financiar directamente porque no es competencia propia, ya que la educación de cero a tres años es cosa del Govern balear. Si se externalizara (es decir, si se diera para que la gestionara una empresa privada), debería tener el mismo precio que las otras guarderías que tiene el Consell para no crear «agravios comparativos». Sin embargo, los informes económicos dicen que eso es imposible sin subvención pública y esto no se puede hacer porque tiene que ser a coste cero para la institución.
Además, el Consell tampoco podría explotarla ahora mismo porque tendría que contratar a personal para su apertura y eso lo prohíbe la ley. En el pleno del mes de septiembre, Minchiotti indicó que no se descartaba ninguna posibilidad, incluso cederla al ayuntamiento o al Govern.
La escoleta de Can Nebot, situada en sa Carroca, arrastraba ya previamente un gran retraso en su puesta en marcha. Las obras las inició el equipo de gobierno de Palau (2003-2007) y continuaron durante el mandato progresista. Fue entonces cuando la empresa constructora tuvo un problema económico y abandonó la obra, lo que obligó a volver a sacarla a concurso.
Posteriormente, el Consell quiso que la gestión la llevara el Ayuntamiento de Sant Josep, quien finalmente dijo que no.
En 2012 el Consell quiso sacar a concurso y privatizar la gestión de la escoleta por un importe de 67.659 euros al año, pero finalmente no lo hizo.
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