El Plan integral de limpieza sostenible de las playas de Santa Eulària ha entrado en vigor, tras culminar un plazo de exposición pública sin reclamaciones. El mismo establece sistemas de limpieza individualizados para cada una de las 24 playas del municipio, con el principal objetivo de evitar la erosión de la costa a causa de la retirada de la posidonia oceánica.

Según el estudio, entre los años 2000 y 2010, de las playas del municipio se retiraron un total de 29.297 toneladas de posidonia, de las cuales 12.000 toneladas correspondieron a sedimentos y arena (un 40%) que se retiró y no volvió al sistema. Asimismo, su traslado al vertedero insular de Ca na Putxa costó a las arcas municipales 1.102.859 euros.

La idea de elaborar este plan surgió del I Congreso Mediterráneo de Gestión del Litoral celebrado en 2008, cuando todos los ayuntamientos de la Isla firmaron un manifiesto con acuerdos en cuestiones medioambientales, entre las que destacó la decisión de dejar la posidonia en las playas durante invierno y transportarla a un sitio de acopio en verano, cuando fuera retirada con motivo de la temporada turística.

Los objetivos que se pretenden implantar con este plan son de carácter ecológico, económico y social, ya que antes la limpieza solo se realizaba por motivos estéticos.

La finalidad ecológica consiste en minimizar el impacto causado por la retirada indiscriminada de la posidonia, «evitando así la pérdida de arena e impidiendo el retroceso de la línea de costa». También se incluye la realización de protocolos de retirada en función de las dinámicas específicas de cada litoral, y una propuesta de espacios de acopio para devolverla a la costa en período invernal.

En cuanto a los objetivos económicos y sociales, el plan prevé reducir los costos generados por la gestión de la posidonia como residuo llevado al vertedero, y conservar las playas «como recurso turístico y motor económico de la Isla».

La aprobación inicial de este plan pasó por pleno en noviembre de 2012, y se publicó en el BOIB hace más de un año, en enero de 2013. Sin embargo, el pasado 10 de abril quedó aprobado de forma definitiva a través de su publicación en el Butlletí Oficial.

Cabe destacar que a lo largo de estos años ya se han adoptado medidas en el marco de este plan, como velar porque la maquinaria de la concesionaria de limpieza no fuera agresiva con el entorno, no retirar la posidonia en invierno e instalar captadores de arena para evitar la erosión de la costa.