La Guardia Civil ha realizado cinco inspecciones a embarcaciones que celebraban las fiestas denominadas «party-boats» en aguas de Eivissa y ha abierto dos actas por actividad irregular.

En el dispositivo, que se llevó a cabo el viernes, participaron inspectores de la Conselleria de Salud y personal de la Conselleria de Turismo y Deportes e intervinieron agentes del Servicio Marítimo y Servicio Aéreo de la Guardia Civil de Baleares, ha informado el instituto armado.

La actuación se realizó en cinco embarcaciones -una en Platja d'en Bossa y cuatro en Sant Antoni de Portmany- por parte de las patrulleras de la Guardia Civil que abordaron los barcos donde se celebran estas fiestas.

La inspección fue realizada por personal de la Dirección General de Consumo y de la Dirección General de Puertos y Aeropuertos del Govern Balear.

Derivadas de la actuación inspectora, se levantaron tres actas de comprobación de rellenado de botellas de bebidas (por parte de Consumo) y dos más por carecer de comunicación previa de actividad que desarrollan (Transporte Marítimo).

Desde el aire, un helicóptero de la Guardia Civil apoyó las inspecciones.

Según el acuerdo al que llegaron las autoridades públicas sobre los party-boats, la competencia de supervisar las condiciones de seguridad de los pasajeros, como el aforo o los chalecos salvavidas, pertenece a Capitanía Marítima y a la Guardia Civil.

La inspección de la documentación requerida para estas actividades (contratos, régimen Seguridad Social, Prevención Riesgos Laborales) es trabajo de Inspección de Trabajo y Guardia Civil, mientras que la vigilancia del cumplimiento de la normativa sobre ruidos y medio ambiente, es responsabilidad de Govern, Ayuntamientos y Guardia Civil.

Según se informa desde el instituto armado, en lo que llevamos de campaña de inspecciones se han revisado el 90 % de las party-boats celebradas en Baleares.