Dos pescadores profesionales, Ángel Colomar y José Marí, han solicitado a la Demarcación de Costas una concesión administrativa para poder usar la caseta varadero y la rampa situadas en es Blancar, la ensenada donde se ubica el polémico quiosco de la isla de Tagomago.
Según el proyecto presentado ante este ente dependiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, para llevar a cabo su actividad profesional los peticionarios «necesitan tener un refugio próxima para solventar cualquier tipo de incidencia». Los solicitantes de la concesión destacan que faenan «en una isla menor donde no hay otro modo de refugiarse» y también necesitan la caseta para «guardar los enseres de pesca».
Exposición pública
El anuncio de solicitud de concesión administrativa fue publicado en el BOIB el pasado jueves 23 de octubre, día a partir del cual existe un plazo de 20 días hábiles para que cualquier persona interesada pueda consultar el proyecto en las oficinas de la Demarcación de Costas y presentar las alegaciones que estime oportunas.
Los pescadores promotores del proyecto, a los que se les ha asignado por sorteo las zonas de pesca Tagomago y Graveta de Tagomago, aseguran que la caseta está en desuso, por lo que es necesario repararla y construir una rampa de acceso a la misma.
La caseta, que está junto al polémico quiosco, ocupa 21 m2 y cuenta con una superficie útil de 13,26 m2 , según el proyecto presentado en la Demarcación de Costas. Esta zona se encuentra entre los hitos 9 y 10 del deslinde de dominio público marítimo-terrestre publicado el 8 de noviembre de 2011.
En el proyecto expuesto en la Demarcación de Costas también figura una declaración jurada de un antiguo usuario de la caseta, José Torres Torres, que afirma que hace más de 12 años que comparte uso con Ángel Colomar, uno de los solicitantes de la concesión administrativa.
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