Instante en el que los concejales del PP y del PSOE aprueban la suspensión parcial de licencias urbanísticas, ayer en el pleno extraordinario de Vila. Foto: DANIEL ESPINOSA

El avance del Plan General de Ordenación Urbanística de Vila estará listo en un mes. Es el plazo que dio ayer la alcaldesa de Vila, Virginia Marí, durante el pleno extraordinario que celebró la corporación en el Ayuntamiento. Después tendrá que aprobarse inicialmente el nuevo texto para que pueda levantarse la moratoria a la que se dio luz verde ayer y cuyo plazo máximo en vigor será de un año.

La alcaldesa calculó que el avance del nuevo PGOU puede estar listo antes de las elecciones de mayo y luego tendrá que aprobarse inicialmente para que se pueda levantar la moratoria de licencias que, a partir del día 18, como señaló el concejal de Urbanismo, Juan Flores, entrará en vigor en el municipio. A partir de ese día, todas las licencias de obra nueva que se hayan solicitado dentro de los tres meses anteriores se verán afectadas.

Ayer se aprobó en un pleno extraordinario la suspensión parcial de licencias urbanísticas como consecuencia del reciente fallo del Tribunal Supremo que anulaba el PGOU de 2009 en vigor por un defecto de forma tras la denuncia de un propietario de ses Feixes. Solo el PREF votó en contra, mientras que se abstuvieron Antoni Villalonga, de EPIC, y el concejal no adscrito Juan Daura.

Virginia Marí insistió en que se agilizarán al máximo los plazos porque no quieren tener paralizado urbanísticamente el municipio: «El avance está casi listo, según el servicio técnico, y creemos que podremos presentarlo en un mes, por lo que hay que agradecer los trabajos realizados por los servicios técnicos y jurídicos de la casa. La idea del levantamiento de las Apis [Áreas de Planeamiento Incorporado] es una propuesta que irá paralelamente al avance; es decir, que lo antes posible intentaremos que las Apis, que ya estaban adaptadas al 2009, se puedan levantar y llevar a cabo sus obras porque no podemos paralizar el Ayuntamiento».

Un 80 por ciento de las peticiones que se han registrado en el Consistorio son de «rehabilitaciones y pequeños arreglos que no van a verse afectados por esta paralización», matizó Virginia Marí, quien subrayó que «sólo el 20% sí puede verse afectado, aunque la mayoría de ellos no tienen ni siquiera el informe ni la licencia admitida porque les faltan documentos tanto de Costas como de Gesa». «El tema de responsabilidad es relativo. En un momento dado se tendrían que devolver las tasas», concluyó la alcaldesa en referencia a las contraprestaciones por la parálisis parcial de obras.

Réplicas

El portavoz del PSOE-Pacte Rafel Ruiz expresó su preocupación «por el ritmo» con el que se está elaborando el nuevo documento y, aunque su grupo votó a favor de la moratoria, pidió que se actúe con «responsabilidad». Ruiz, que se mostró muy crítico con el propietario de ses Feixes por el que se anuló el plan de 2009, consiguió que en la redacción del nuevo plan urbanístico se incorporen dos puntos de su cosecha: que el nuevo PGOU se adecue al de 2009 y que se encargue a la mayor celeridad el Plan Ambiental Estratégico. En este sentido, la primera edil de Vila aseguró que ya está encargado el informe ambiental mientras se valoran las tres propuestas presentadas.

Más crítico con la aprobación de la moratoria de licencias fue el portavoz del PREF en el Consistorio, Nacho Rodrigo, quien advirtió de posibles indemnizaciones y se preguntó qué pasará ahora con los proyectos de los hoteles Victoria, Cipriani, Montesol y Playa Real.