La Plataforma de Afectados por la Hipoteca en Eivissa interpuso un recurso que logró parar el desahucio previsto para hoy.

La Plataforma de Afectados contra la Hipoteca (PAH) de Eivissa logró ayer frenar un desahucio cuya notificación estaba prevista para hoy a las 11,00 horas en la calle Sa Sequia des Mallorquí, en el municipio de Santa Eulària. Sin embargo la presión de la plataforma logró suspender el procedimiento: «Gracias al recurso que interpuso el abogado de la PAH hace un par de días se ha logrado esta suspensión hasta nueva orden», explicó José Luis Ruiz, portavoz de la plataforma.

La orden de lanzamiento del desahucio afectaba a una pareja y al hermano de uno de ellos que sufre un 87% de discapacidad, y por este motivo tenían toda la casa adaptada con las medidas arquitectónicas pertinentes. Esta familia ya fue desahuciada hace dos años pero volvió a ocupar el piso, ahora estaba negociando con la entidad Bankia para que les refinanciara la deuda o les permitiera pagar un alquiler social. Sin embargo, la entidad bancaria ya había vendido el piso a un tercero que ahora es el que quiere ejecutar el desahucio del inmueble, «a pesar de que la entidad se había comprometido a negociar», aseguró Ruiz.

La PAH se puso ayer en contacto con el Consell d’Eivissa y con el Ayuntamiento de Santa Eulària para hablar sobre este desahucio y, según explicó Ruiz, el Consell se comprometió a hacer gestiones para evitar que los bomberos tuvieran que ir a hacer efectivo el desahucio y el Ayuntamiento de Santa Eulària hizo lo mismo con la Policía Local del municipio.

Bankia

Los miembros de la plataforma aseguraron que en Eivissa hay «entre 15 y 20 casos» en proceso de desahucio, aunque ahora no hay ninguna orden de ejecución. Destacaron que la entidad menos flexible es Bankia: «Por lo general los bancos se han flexibilizado bastante con este tema y están abiertos a negociar como el Sabadell, Sa Nostra o el BBVA pero con Bankia es mucho más difícil y es la que ha sido rescatada con dinero público, es un poco sangrante lo de Bankia, es un banco muy opaco», advirtió Ruiz, «y nunca quieren reunirse con los afectados. En Eivissa hay unos tres o cuatro casos con esta entidad».

Es el caso de Inés Torres que tiene una hipoteca con Bankia. Ha negociado una carencia de 2 años por 200 euros al mes pero no quiere aceptarlo porque sabe que luego la carencia encarecerán mucho los pagos posteriores. «El 9 de octubre nos dijeron que no aceptaban la dación en pago y desde entonces que no sabemos nada más», explicó la propia afectada.