Imagen de archivo de una de las calles del barrio de sa Penya. | (c) Sergio G. Canizares

Los vecinos y propietarios agrupados en la asociación Salvem Sa Penya exigen al Ayuntamiento de Eivissa participar en la recuperación del barrio después de los desalojos forzosos de las viviendas ocupadas en la UA27, UA2 y UA3 que tiene que acometer el Ayuntamiento de Eivissa en cuatro meses, tal y como dictó el Juzgado de lo Contencioso número 1 de Palma en un auto fechado el 11 de enero. En este escrito se dictamina, además, que los desalojos deberán comunicarse con 15 días de antelación.

Desde Salvem Sa Penya explicaron que esperaban que la resolución llegara antes, «pero no por ello es menos grata». «La rehabilitación para nosotros es vital y nuestra posición ahora será exigir que se adopten esas medidas tan necesarias. Por nuestra parte, no escatimaremos ni en medios ni en esfuerzos. Es por ello que queremos participar en la rehabilitación de una forma real y no basta con que se nos escuche», explicaron desde la asociación mediante un escrito en el que señalan, además, que el Ayuntamiento de Eivissa aún no se ha puesto en contacto con ellos desde que se dictó el auto judicial definitivo. «Pese a las declaraciones que se han hecho desde la concejalía de Cultura i Patrimoni y de Serveis Socials no podemos ser muy optimistas con las futuras actuaciones del Ayuntamiento porque si algo tenemos claro es que no se puede llevar a cabo la rehabilitación de un barrio trabajando sobre un plano y es precisamente eso lo que quieren hacer».

«Multidisciplinar»

En este sentido, desde Salvem Sa Penya tienen claro que «la problemática» del barrio es «multidisciplinar», razón por la que se requiere la participación «no sólo de diferentes áreas del Consistorio sino también de los vecinos de sa Penya y de otras personas u organismos que, aunque no pertenezcan al barrio, también son parte del municipio. Pero como siempre, el Ayuntamiento cree saberlo todo y, en realidad, nada sabe». A esto hay que sumar la situación de «emergencia social» que padecen los menores que viven en el barrio «en casas que el propio juzgado ha declarado que no reúnen las condiciones mínimas de una vida saludable y, pese a lo que diga el señor Joan Ribas, la presencia de los educadores y de los servicios sociales en el barrio hasta la fecha ha sido nula», lamentaron desde esta asociación, desde donde tienen la sensación, según explicaron, que «el Ayuntamiento no sabe cómo resolver la problemática de sa Penya; este tema parece que les desborda», concluyeron.

LA NOTA

Piden la misma diligencia que con el emisario de Talamanca

«En otros asuntos, en cambio, proceden con extremada diligencia, urgencia y coordinación, como con el edificio de es Martell o el emisario de Talamanca pese a ser asuntos mucho más complejos y en los que hay que poner de acuerdo a otras administraciones, de ámbito supramunicipal y a otros organismos no municipales. Se trata de hacer las cosas con absoluta profesionalidad y el que no esté capacitado o no tenga la voluntad firme de hacerlo debe quedar al margen», explicaron desde la asociación.