Las quejas sobre la suciedad que presentan las calles de la ciudad de Eivissa se han multiplicado en las últimas semanas coincidiendo con la alta afluencia de turistas que han llegado con el inicio de la temporada alta.

La nueva concesionaria municipal de limpieza y recogida de basuras no da abasto para recoger la basura y limpiar las calles, a pesar de que, según el Ayuntamiento de Vila, la empresa Valoriza ha contratado a diez empleados más este verano y en estos momentos 125 personas se dedican a estas labores.

Los comerciantes del paseo de Vara de Rey afirman que la ciudad está sucia pero admiten que se tiene que dar «un tiempo prudencial» a la nueva contrata teniendo en cuenta que «se ha cuadriplicado la población por el verano».
Sin embargo, califican de «indecente» el estado en el que se encuentran los contenedores de Vara de Rey, en pleno centro de la ciudad, algunos de los cuales está incluso «cojo». Sobre el hedor que desprenden estos contenedores, también centraron sus críticas en la actitud incívica de algunos locales que tiran la basura fuera de los horarios establecidos. «Si tiran las bolsas a las siete de la tarde, a las once de la noche no hay quien pase por delante», añadió la propietaria de un establecimiento.

Capítulo aparte merecen las aceras. «Están negras y llenas de vómitos y orina». Por este motivo, los trabajadores de los diferentes negocios se ven obligados a barrer cada mañana las aceras situadas enfrente de los establecimientos porque están llenas de papeles y colillas que los viandantes han tirado durante la noche.

El centro de Vila no es, en cambio, la parte de la ciudad que presenta peor estado. La zona que presenta mayores niveles de suciedad es la del Eixample, especialmente las calles adyacentes al Mercat Nou donde el mal olor se respira desde primera hora de la mañana.

Los comerciantes de la calle Cataluña se quejan de que las calles «hacen mucho olor a orín» y creen que la limpieza no ha mejorado con el cambio de contrata. «Estamos igual o peor que el año pasado», lamentan.

El problema en este caso es, a su juicio, que los operarios de la limpieza «tiran mucha agua pero no limpian a fondo» y, por este motivo, no consiguen eliminar el hedor que emana de muchos rincones donde la gente orina.

También las quejas son la tónica entre los propietarios de los puestos ubicados en el Mercat Vell, en pleno barrio de la Marina. Aseguran que los operarios municipales sólo limpian una vez a la semana el antiguo mercado y solicitan una limpieza integral de las instalaciones, especialmente de las vigas de madera que hay en el interior del edificio.

En la plaza de la Constitució, el contenedor donde se almacenan los cartones está lleno desde primera hora de la mañana. «Antes venían dos veces al día y ahora solo lo hacen una vez», señalaron.

Por su parte, desde el Ayuntamiento intentan apaciguar las airadas críticas de los ciudadanos y aseguran que la situación se conseguirá revertir cuando acabe la temporada y disminuya la presión poblacional sobre el municipio. La conclusión de la concejala de Medi Ambient es clara: «Tenemos todo el invierno para limpiar. La ciudad está muy sucia y no es lo mismo limpiar sobre limpio que limpiar unas calles que llevaban muchos años sucias».

LA NOTA

El Ayuntamiento reconoce que la limpieza de la ciudad no ha mejorado

La limpieza de las calles de Vila protagonizó una parte del pleno municipal del Ayuntamiento de Eivissa en el que la concejala de Medi Ambient, Montse García, reconoció que el aspecto de la ciudad no ha mejorado respecto al verano pasado.

García justificó el estado de las calles de Vila señalando que la nueva contrata de limpieza, Valoriza Servicios Medioambientales S.A., ha empezado a trabajar en plena temporada alta y recordó que, desde el su incorporación el pasado 13 de junio, tiene seis meses por delante para establecerse. «Tenemos tantas ganas de ver la ciudad limpia que no tenemos paciencia. Hay que darles una oportunidad y dejar trabajar a Valoriza», reflexionó la concejala.

El concejal popular Juan Flores señaló que el equipo de gobierno se «ha precipitado» por comenzar con la nueva contrata sin disponer de todos los medios que deben llegar antes del 13 de agosto.