Abaqua recibió ayer la autorización por parte de Sanidad después de que los análisis del agua hayan sido favorables. A primera hora de esta mañana han parado las máquinas de ses Eres para activar la nueva conducción. Foto: D. ESPINOSA

Los vecinos de Sant Jordi, sa Carroca, Can Raspalls y la parte alta de Platja d’en Bossa, alrededor de 9.000, reciben desde primera hora de esta mañana agua procedente de las desaladoras de Vila y Sant Antoni después de que la Agència Balear de l’Aigua i Qualitat Ambiental (Abaqua) recepcionara ayer los informes favorables de Sanidad para activar la conexión.

La puesta en marcha de la nueva infraestructura se ha demorado más de un mes respecto a la fecha anunciada por Abaqua, que ha tenido que limpiar 7,5 kilómetros de tuberías que no se habían utilizado durante muchos años. Antes de distribuir el agua desalada por estos conductos los análisis debían garantizar que estaban en condiciones adecuadas.

Los primeros análisis, dados a conocer el 27 de agosto, resultaron negativos. El máximo responsable de Abaqua, Antoni Garcias, atribuyó el primer revés por parte de Sanidad a «las prisas» por poner en funcionamiento la nueva conexión para el suministro de agua de calidad en un área afectada desde hace años por la alta salinidad en infraestructuras obsoletas.

Pero las obras que unen el depósito de ses Coves Fosques con el anillo de las desaladoras de Vila y Sant Antoni habían finalizado un mes antes, el 26 de julio. Por lo tanto, el tiempo de espera desde que concluyeran los trabajos de interconexión hasta su puesta en marcha ha sido de 56 días.

Los análisis se repitieron hace dos semanas y ayer por fin la Agencia Balear del Agua recibió la autorización por parte del Ministerio para ‘abrir el grifo’ al agua desalada en esta zona del municipio de Sant Josep.

No obstante, ayer no pudo activarse el sistema ya que, antes, la concejalía de Aguas del Ayuntamiento debía recibir copia del informe de Sanidad para dar la orden de recibir el suministro a Aqualia, la empresa concesionaria del servicio en Sant Josep. Según explicó ayer el concejal Ángel Luis Guerrero, varios operarios trabajaron anoche en los últimos detalles de la nueva planta y, para su puesta en marcha, también era necesario detener el funcionamiento de la vieja desaladora móvil de ses Eres. «Es el closing más esperado del verano», bromeó Guerrero.

LA NOTA

Depuradora de Cala Tarida: un mes más de espera

La nueva depuradora de Cala Tarida, cuya construcción comenzó en el año 2007, sigue pendiente de trámites administrativos para entrar en funcionamiento. La instalación estaba pendiente del suministro eléctrico desde principios de verano, cuando acabó su construcción.

Aunque Endesa se había comprometido a instalar el cableado a principios de este mes para su inmediata puesta en marcha, fuentes de la conselleria de Medi Ambient señalaron ayer que todavía están pendientes de la notificación por parte de Endesa del fin de las obras para poder poner el contador.

Desde Abaqua informaron de que la puesta en marcha de la depuradora «puede tardar un mes desde que se hizo el cableado».